_
_
_
_

Wall Street trata de superar el 11-S

Nueva York ha perdido 43.300 empleos del sector financiero durante el último año

La mitad de los estadounidenses está metido en Bolsa y aún tratando de reponerse de las desastrosas pérdidas producidas por el estallido de la especulación de las puntocom, a las luego se unió el desastre del 11 de septiembre y la debacle de Enron.

La Bolsa, capaz de crear un efecto de riqueza psicológica, no termina de creerse la historia de la recuperación. No hay un sector con liderazgo claro y los inversores han optado por los valores seguros. Nada de pedir y esperar la luna. Ahora lo que vale y se busca es la solvencia y los bienes de consumo cotidiano, mientras se mira de reojo al polvorín del Próximo Oriente.

El clima no es muy propicio. Wall Street ha prescincido de 43.300 empleados durante el último año, la mayor oleada de despidos, recuerda Bloomberg, en el último cuarto de siglo. Y el moviento quizás no haya terminado todavía. 'Todas las empresas tienen una lista para la próxima oleada', se lamente Henry Higdon, presidente de la empresa de contratación Higdon Group. La ciudad de Nuva York tenía unos 170.000 empleos relacionados con el mercado bursátil a finales del pasado mes de febrero, un 11% menos que seis meses antes.

Los próximos resultados empresariales del tercer trimestre marcarán la pauta de la evolución de los mercados bursátiles

Pero el índice Dow Jones ha recuperado ya los niveles previos a la caída en picado que siguió al 11 de septiembre, que no eran brillantes sino los propios de una atmósfera de economía deprimida. La trabajosa tendencia al alza de los índices ha sido equiparada con la de un escalador que está a punto de coronar a quien cada vez le quedan menos fuerzas. No es la euforia de quien sale del pozo, sino la de un desfallecido.

Los profesionales de la inversión no encuentran valores atractivos. John O'Donoghue, uno de los responsables de inversión en el Credit Suisse First Boston, decía esta semana que la situación bursátil le recordaba mucho a la del periodo 1989-1990, 'cuando el mercado estuvo zizagueando durante un par de años, sin ningún catalizador para moverse en un dirección definida'.

La economía real parece haber reaccionado al estímulo del dinero barato, pero los mercados están desvitalizados. La semana pasada el Dow Jones parecía querer ir hacia el 11.000 y ésta ha apuntado hacia el 10.000. William Volman, analista y escritor económico, cree que la Bolsa tiene por delante una década de mediocridad con crecimiento anual promedio en torno al 3%.

El Dow Jones ha subido un 3,8% en el primer trimestre, mientras el Nasdaq, en el que cotizan las empresas tecnológicas, caía un 5,4% arrastrado por el sector de las telecomunicaciones, que sigue en la carrera de pérdidas que inició en el ejercicio 2000.

El efecto Enron continúa pesando en los inversores, recelosos de la ingeniería contable. Las medidas tomadas para acabar con ella harán que los resultados de muchas empresas no sean tan tentadores como lo fueron en el pasado. El dinero se ha vuelto más cauto y opta por firmas con sólido pedigrí, regidas sin exuberancia y que producen bienes de uso cotidiano frente a Intel o IBM. La tónica de los resultados del primer trimestre que pronto empezarán a conocerse marcará la pauta de la evolución de los mercados.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_