Las 'big five' alzan la bandera de la unidad
Las grandes firmas de auditoría aceleran el proceso de unificación de la profesión en medio del escándalo Enron
El escándalo Enron ha pillado a los miles de auditores españoles y a las empresas para las que trabajan divididos en tres corporaciones profesionales. Después de años de debate sobre la necesidad de unificar la profesión, un grupo de auditoras entre las que se encuentran las llamadas cinco grandes, se han puesto de acuerdo para unirse en una nueva plataforma profesional.
El objetivo de la futura corporación profesional es ser el interlocutor oficial cuando se retome la reforma de la ley de auditoría
El mapa de la auditoría en España lo dibujan 962 sociedades y algo más de 16.000 auditores, de los cuales ejercen 4.600
Las llamadas cinco grandes, que copan más del 80% del mercado español de auditoría, están hoy dividas. Andersen, que escruta las cuentas de la mayoría de las empresas del Ibex-35, Deloitte & Touche y Ernst & Young, están en el Registro de Economistas Auditores, que depende del Consejo General de Colegios de Economistas, reacio a la unificación. PricewaterhouseCoopers y KPMG militan en el Instituto Auditores- Censores Jurados de Cuentas, una corporación de derecho público que lleva años batallando porque los auditores tengan una sola voz.
A estas dos corporaciones hay que añadir otra, la formada por los colegios de titulados mercantiles y empresariales -alrededor del 5% del mercado- para entender el mapa profesional de la auditoría en España. Un mapa que dibujan 962 sociedades y algo más de 16.000 auditores, de los cuales ejercen 4.603, según los últimos datos del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas del Ministerio de Economía, de 2000.
Ahora, las cinco grandes firmas y otras seis medianas se han puesto de acuerdo para estar juntas en la misma plataforma profesional, que nacería del actual instituto de censores y representaría en exclusiva los intereses de los auditores. Hoy los auditores que pertenecen a un colegio de economistas, por ejemplo, comparten demandas con otros licenciados que ejercen profesiones muy diversas.
La unificación es objeto de debate en la profesión desde hace años, casi tantos como tiene la ley que regula su actividad, aprobada en 1988, cuando gobernaban los socialistas. De hecho existe un grupo de trabajo en el que se sientan representantes de las tres corporaciones desde hace meses. El acuerdo, sin embargo, se ha producido hace un par de semanas, en un momento en que el sector sufre una importante crisis de imagen como efecto del caso Enron.
El objetivo de la nueva organización, aún por definir, es ganar fuerza para convertirse en el interlocutor oficial cuando el Gobierno retome temas fundamentales para la profesión que hoy están parados. Como la reforma de la ley de auditoría, que las tres corporaciones defienden. En esa reforma, que quedó pendiente de la anterior legislatura, los auditores se juegan asuntos tan importantes como el régimen sancionador, la responsabilidad o el control de su actividad.
A este cambio hay que sumar la ley financiera, que ya ha pasado por el Consejo de Ministros y espera el debate parlamentario. Si los diputados y senadores no lo remedian, esta norma, presentada por el ministro de Economía, Rodrigo Rato, el 1 de marzo, permitirá a los organismos supervisores, como la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), acceder a los papeles de trabajo del auditor cuando existan indicios de irregularidades, a lo que se resisten los estos. La unidad facilitaría además la defensa de la profesión cuando vienen mal dadas. Es el caso de los recientes escándalos Enron y Gescartera que han salpicado a todo el sector a pesar de que 'en España se hacen 25.000 auditorías obligatorias al año y los problemas se cuentan con los dedos de la mano', en palabras de un auditor.
El problema ahora es cómo hacer realidad el proyecto. Y cuanto antes, mejor, aseguran fuentes del sector. La base será el actual instituto de censores jurados, la única corporación que no es un colegio profesional. En él están registrados alrededor del 40% de los auditores ejercientes y casi la mitad de las sociedades auditoras. Sus promotores cuentan a su favor con el efecto 'arrastre' de las cinco grandes y con la simpatía de otros sectores de la profesión, como el Foro de Auditores Pro-Unificación. Y la resistencia del Consejo de Colegios de Economistas, que a pesar de coincidir en un 90% con las demandas de las otras corporaciones, se resiste a la unificación. 'Las grandes firmas no nos han dicho nada, pero están nerviosas', asegura el presidente de los economistas, Fernando González Moya, para quien 'una cosa es el sector, la patronal, y otra muy distinta la profesión'. Si el proceso de unificación culmina con éxito, ésta sufrirá un vuelco. La ley encomienda hoy a las tres corporaciones los exámenes de acceso, que se celebran cada tres años, y la elaboración de las normas técnicas de auditoría.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.