Los líderes europeos elevan en cinco años la edad media de jubilación

El Consejo Europeo de Barcelona ratificó el compromiso de la Unión Europea de alcanzar a final de esta década el pleno empleo y, para ello, los Quince se fijaron una serie de objetivos concretos, que van desde incrementar el acceso de la mujer al mundo laboral hasta aumentar progresivamente en cinco años la edad media de jubilación efectiva en cinco años en el año 2010, que ahora es de 58 años, aunque hay diferencias entre uno y otro país.

El camino hacia el pleno empleo fue el corazón de la estrategia de la cumbre europea de Lisboa de hace dos años y la cita de Barcelona sirvió para ratificarla bajo el objetivo genérico de crear 'más y mejores empleos'. También en este terreno quedaron claras las dos concepciones que hoy enfrentan a los máximos partidarios de la liberalización y de la flexibilidad laboral, como José María Aznar y Tony Blair, y quienes defienden una mayor incidencia de los aspectos sociales y de la protección a los más desfavorecidos, como pusieron de relieve en Barcelona el francés Lionel Jospin o el alemán Gerhard Schröder.

Los primeros, por ejemplo, vieron con satisfacción que los Quince daban luz verde al principio de que debe evitarse que las prestaciones por desempleo sean en ocasiones ligeramente menores que los salarios, con lo que se desincentiva la búsqueda de empleos. En línea similar se aprobó la propuesta para que en la negociación salarial se tenga en cuenta el nivel de productividad y la situación del mercado laboral en cada región, aunque Berlín evitó que en el texto final hubiera una relación directa entre lo uno y lo otro.

Por el contrario, los líderes socialdemócratas, mayoritarios en la cumbre, comprobaron con alegría que también eran asumidos los puntos relativos a que, en caso de rebajas fiscales, se dé prioridad y ventaja a los trabajadores con los salarios más bajos, y que se garantice un equilibrio adecuado entre flexibilidad para poder cambiar de trabajo y seguridad para mantenerlo. Es más, los Gobiernos deberán garantizar la formación de los empleados a lo largo de toda la vida laboral, a la vez que se deberá crear un sitio especial en Internet para la búsqueda de empleo en toda la Unión para incrementar la movilidad de los trabajadores.

'La vía para ser hoy más competitivo no es un exceso de regulación, sino un mercado laboral flexible combinado con una fuerte inversión en investigación y educación', sentenció Blair. 'La seguridad de los trabajadores, la sanidad, la lucha contra la pobreza o la igualdad laboral entre hombres y mujeres son algunos de nuestros principios', destacó Jospin.

En un equilibrio permanente entre unos y otros, los Quince aprobaron una serie de medidas que permitirán conciliar la vida familiar y laboral, fomentando por ejemplo la creación de guarderías o creando más puestos de trabajo para quienes atienden a personas de elevada edad. A la vez, se potenciará que los desempleados, y de forma especial las mujeres, reciban formación en nuevas tecnologías de la información y de la comunicación.

20 millones de empleos

Frente al reto del envejecimiento, la UE acordó reducir los incentivos a la jubilación anticipada en las empresas y deberán hacerse esfuerzos por aumentar las oportunidades de los trabajadores de mayor edad. Con todas estas medidas, la UE reafirma sus objetivos de hace dos años: que la tasa global de empleo se eleve al 70% (hoy seis puntos menos), lo que supone crear 20 millones de empleos nuevos, de los que entre 11 y 12 deberán ser para mujeres y cinco para mayores de 55 años.