Condenado a 24 años de cárcel el asesino de Mar Herrero

Los magistrados de la Sección Decimosexta de la Audiencia de Madrid han condenado a 24 años de prisión y al pago de una indemnización de 180.303 euros a Luis Patricio Andrés, para quien las acusaciones popular y particular pedían penas de 31 años de cárcel por matar a su ex novia, Mar Herrero, en octubre de 1999. Los jueces han eximido al Estado como responsable civil del abono de esta indemnización, tal y como solicitaban las acusaciones. Luis Patricio Andrés fue declarado culpable por un jurado.

Mar Herrero fue asesinada por Luis Patricio, con el que había mantenido una relación sentimental, cuando éste se encontraba en libertad provisional. El procesado cumplía en aquella época una condena de 17 años de cárcel por haber disparado a su anterior novia cuando ésta se hallaba embarazada. Mar, antes de morir, denunció en reiteradas ocasiones a Luis Patricio por amenazas.

Los seis hombres y cinco mujeres que formaron parte del jurado entendieron que había quedado probado en el juicio que Luis Patricio fue la persona que asesinó a la que fue su novia. El veredicto fue rápido y unánime. El fiscal, tras escuchar al jurado, elevó la petición inicial de condena de 18 a 31 años.

Trampa mortal

La sentencia señala que, en marzo de 1999, el acusado entabló una relación sentimental con Mar Herrero, y que en el verano de ese mismo año ella decidió poner fin a dicha relación, circunstancia que no fue aceptada por Luis Patricio. El ahora condenado, utilizando a terceras personas y adoptando él mismo la identidad de otras, citó a Mar a las seis de la mañana del 13 de octubre de 1999 en la plaza de Castilla de Madrid, con la excusa de realizar un trabajo como maquilladora para una productora. La joven acudió a este lugar, donde la esperaba Luis Patricio en una furgoneta. A punta de navaja, obligó a Mar a subir al vehículo, donde, con el 'calculado fin de causarle la muerte', la apuñaló y asfixió, según se recoge en la sentencia.

Antes de morir, Mar Herrero había realizado numerosas denuncias contra el que fue su novio, e incluso pocas horas antes de ser asesinada pidió ayuda a la psicóloga y a la trabajadora social que se ocupaban de Luis Patricio durante su libertad provisional.