_
_
_
_
_

Los partidos de izquierda alertan sobre la alta tasa de alumnos extranjeros en Salt

La escuela pública La Farga, en Salt (Gironès), tiene más del 60% de los alumnos de primaria procedentes de la emigración. En P-3 esta cifra se eleva al 85%. Los partidos de la oposición de izquierda alertan de la peligrosa dinámica que está experimentando la enseñanza en el municipio y reclaman al Gobierno de CiU una implicación más decidida para romper con esta situación.

Los diputados del PSC-Ciutadans pel Canvi, ERC y ICV presentaron a finales de julio una proposición no de ley en la que proponían algunas medidas para encarar los problemas de la educación en un municipio que tiene una tasa de inmigración en torno al 10% de la población.

A raíz de esta iniciativa, y en una reciente resolución aprobada por todos los grupos políticos, el Parlamento ha acordado instar al Gobierno a mantener una comisión de matriculación permanente y a agilizar las obras de construcción de un centro de educación infantil y primaria en el sector de Mas Masó y de un instituto de educación secundaria junto a la fábrica Coma-Cros. También prevé reconvertir el actual instituto de educación secundaria Vallvera en una escuela de educación infantil y primaria para incrementar la oferta escolar.

El diputado Martí Sans (PSC) reclama un plan de choque para dotar de mayores recursos a los profesores y ofrecer ayudas sociales a las familias. Sans lamenta que no se haya aceptado abrir un centro de estudios nocturnos, única vía para que los inmigrantes más jóvenes puedan compaginar trabajo y estudios.

Francesc Ferrer (ERC) entiende que la Generalitat no ha querido ver en Salt un caso excepcional que requiere un plan específico. Por su parte, Joan Boada, diputado de ICV, se pregunta dónde está la integración en clases con el 85% de inmigrantes. 'Quizá en la escuela La Farga tendremos que tratar la diversidad de los otros', aseguró Boada aludiendo a los escasos alumnos autóctonos. El diputado ecosocialista consideró denunciable que en un centro privado concertado, situado a escasa distancia, los alumnos de origen inmigrante sean sólo el 15%. 'Debemos equilibrar de verdad', zanjó.

Los diputados mantienen que la integración podría ser más efectiva si los alumnos inmigrantes pudieran distribuirse por toda la zona metropolitana de Girona, en lugar de dejar que el reparto de los hijos de la inmigración se efectúe únicamente en el ámbito estricto del término municipal o, en algunos casos, en el propio barrio.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_