El Parlament elevará hasta los 18 años la edad mínima para comprar alcohol

Los jóvenes catalanes menores de 18 años no podrán consumir alcohol en la calle, pero tampoco en el bar. El Partido Popular (PP) y Convergència i Unió (CiU) unieron ayer sus votos en el Parlament para modificar una ley de 1985 con el fin de elevar de 16 a 18 años la edad mínima para comprar alcohol. La reforma se materializará en el pleno de la próxima semana y, salvo imprevistos, entrará en vigor previsiblemente dentro de un mes.

La propuesta partió del diputado del PP Daniel Sirera, quien ayer desvinculó la iniciativa de la polémica del botellón en Madrid puesto que su texto se presentó en mayo del año 2000. El diputado justificó la reforma legislativa por la necesidad, según reza la exposición de motivos, de 'proteger a los jóvenes como a grupo social más vulnerable ante el consumo de productos que generan dependencia'.

Hasta ahora, los jóvenes de 16 a 18 años podían comprar alcohol entre las 8.00 horas y las 24.00 horas, siempre que fuera de una graduación inferior a los 23 grados. Estas matizaciones quedarán ahora abolidas: los establecimientos tendrán prohibido vender alcohol a los menores de 18 años, del grado que sea y a la hora que sea.

Esquerra Republicana (ERC) y el Partit dels Socialistes (PSC) se abstuvieron, aunque los socialistas ya avanzaron que en el pleno se opondrán a la medida. Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) votó en contra de la reforma al considerarla 'puramente represiva'.