'La cultura no se puede medir por beneficios económicos'

Por los estudios que Bilbao Arte pone a disposición de los artistas que los necesiten han pasado ya tres decenas de autores, la mayoría, de Vizcaya. Algunos de ellos ya empiezan a despuntar. 'Hay muchos que han tenido mucha y muy buena repercusión. Por ejemplo, tenemos el caso de Naia del Castillo, que estuvo con nosotros el primer año y ahora la ha cogido la sala María Martín de Madrid', recuerda el responsable del centro, Javier Riaño. Bilbao Arte se consolida. Para este nuevo año, se van a introducir cambios en las actividades del centro y, además, por primera vez, van a participar en Arco, la Feria de Arte Contemporáneo.

Pregunta. Bilbao Arte se inauguró en noviembre de 1998. ¿Qué balance hace?

Respuesta. Las espectativas que teníamos eran menores del resultado. Queríamos ser un centro de apoyo a los artistas, y eso lo estamos cumpliendo. Yo creo que 2002 va a ser un año importante, una conclusión de los anteriores.

P. ¿Habrá novedades en el centro este año?

R. Vamos a innovar un poco la sala de exposiciones y habrá un apoyo más directo a los artistas en la producción de su obra. Cosas que hasta ahora no habíamos podido hacer y ahora sí.

P. ¿Podría concretar más?

R. Haremos exposiciones más de carácter social, para acercar a la cultura a una parte de la sociedad que aún no se ha acercado y que necesitamos. Queremos enseñar un tipo de obra con compromiso y nos vamos a abrir a artistas que no sean sólo de Bilbao Arte. Queremos que la sala de exposiciones sea un lugar de referencia.

P. Entonces 2002 será un punto de inflexión en Bilbao Arte.

R. En estos tres años, Bilbao Arte se ha consolidado como un hecho. Curiosamente nos conocen más fuera de la ciudad que dentro, tenemos contactos, convenios, proyectos...

P. El centro depende del Ayuntamiento y de patrocinadores, ¿Bilbao Arte es todo gasto?

R. Es que yo creo que la cultura es todo gasto. No podemos tener beneficios económicos. Tenemos uno que es social y consiste en elevar la cultura general.

P. ¿Cómo se mide que Bilbao Arte vaya bien?

R. Por la repercusión social, por ocuparnos de una parte de la sociedad que estaba desatendida. A los jóvenes artistas les proporcionamos unos estudios durante un año para la realización de su obra, con unas condiciones muy cómodas para acceder a ellos y completar la obra que deseen. La cultura no se puede medir por beneficios económicos. Creo que ése es un error que se está poniendo muy de moda, sacar números de visitantes y actividades.

P. ¿Los artistas jóvenes que pasan por los estudios, les dejan alguna obra?

R. Siempre. Tenemos unos fondos, que pasan a ser patrimonio del Ayuntamiento. En un futuro ya se verá qué se hace con ellos y con lo que nos han dejado también grandes artistas que han impartido seminarios.

P. ¿Cuántos artistas jóvenes han pasado por Bilbao Arte en estos tres años?

R. Por los estudios, entre 12 y 15 anuales. Pero en talleres de trabajo y conferencias han pasado la inmensa mayoría de los artistas del País Vasco.

P. ¿De los artistas consagrados que han impartido esos talleres y conferencias, cuál es el que ha tenido mayor repercusión?

R. Manolo Valdés, por la generación que marcaba, porque perteneció al Equipo Crónica, y porque nos hizo un favor estando aquí. Su dedicación fue espectacular, entraba a las nueve de la mañana a trabajar con los artistas y salía a las nueve de la noche. Llevó tres talleres simultáneos: pintura, grabado y escultura. Su entusiasmo fue increíble.

P. ¿Para 2002 a quién esperan?

R. Lo primero, haremos un seminario de pintura que impartirá Iñaki de la Fuente. Luego, un seminario de paisajes para el que van a venir grandes personajes y lo va a dirigir Jose Mari Lazkano, y otro sobre 3-D e imagen digital para el que viene una gente de Kuala Lumpur que es donde está lo mejor en ese área en estos momentos.

P. Y la cita de Arco.

R. Sí, supone todo un reto ir a Arco. Para nosotros es importante y creo que para todos los artistas de Bilbao que vaya Bilbao Arte, en el fondo, tienen que sentirse un poco representados. Nosotros representamos la ciudad y al arte más joven.

P. ¿Qué van a presentar?

R. Hemos tenido mucho cuidado en no llevar obra artística. No somos una galería. Llevamos la institución. Dentro de ella, todo lo que hemos hecho.

P. ¿Lo tiene fácil un artista vasco para dedicarse a lo suyo?

R. Hay ayudas, becas, centros, lugares a los que acudir. Lo único que se necesita es trabajar. Esta es una profesión como cualquier otra y hay que meter horas.