Maragall promete 600 euros anuales a todas las familias por cada hijo menor de seis años

Izquierda y derecha han entrado en una carrera para presentar al electorado sus propuestas de política familiar. El líder de la oposición, Pasqual Maragall, expuso ayer su programa de apoyo a las familias. En el debate de la moción de censura al Gobierno de Jordi Pujol, Maragall lanzó la medida estrella de este plan: la asignación anual de 600 euros por cada hijo menor de seis años. Ayer ratificó este compromiso y le agregó el de crear 30.000 plazas de guarderías municipales en cinco años y ampliar los servicios de ayuda domiciliaria para que en cuatro años atiendan a 48.000 personas en vez de las actuales 34.000. El plan cuesta 275,8 millones de euros el primer año y 874,7 millones el cuarto.

Cada vez que los diputados de la izquierda promueven en el Parlament medidas de apoyo a la familia, cosa que hacen desde hace relativamente pocos años, reciben de la derecha la misma respuesta: 'Bienvenidos a la política familiar, nosotros hace años que la practicamos'. Maragall dio ayer su réplica a esta afirmación, que a su juicio oculta una penosa realidad. Dijo que justamente la falta de una política familiar en Cataluña y en España 'la pagamos hoy con una baja natalidad, la escasez de mano de obra, déficit de formación y alta proporción de población de edad elevada' sin la atención necesaria.

A Maragall no le arredra que el Gobierno de CiU haya entrado al trapo de mejorar también sus medidas de política familiar. Al revés, ayer lo consideró un éxito propio. 'Está bien que el Gobierno siga nuestra iniciativas si esto supone un progreso', dijo, 'porque significa que marcamos su agenda y en cierta medida estamos gobernando desde la oposición'.

El aspirante socialista a la presidencia de la Generalitat hizo estas afirmaciones en un acto celebrado en el centro cívico de La Farinera, en el barrio del Clot, en Barcelona, ante unas 300 personas. Fue el primero de los actos públicos preparados por el PSC para dar a conocer con detalle las 17 políticas alternativas presentadas en octubre por Maragall junto con la moción de censura.

La presentación constó de dos partes muy diferenciadas. Introducidos por la alcaldesa de Badalona, Maite Arqué, y el secretario de política económica del PSC, Antoni Castells, en la primera intervinieron cuatro expertos. El profesor de sociología Lluís Flaquer; la concejal de Servicios Sociales de Girona, Pia Bosch; la profesora de sociología Judit Astelarra, y los economistas Vicenç Navarro y Josep Oliver.

Entre todos explicaron que la familia 'es una infraestructura básica de la sociedad'; que en la actualidad hay una gran contradicción entre la voluntad de las mujeres de trabajar y tener actividades públicas, por una parte, y su deseo de tener hijos, por otra; que eso ha llevado a que Cataluña tenga una de las tasas de fecundidad más bajas del mundo y, al mismo tiempo, una tasa de ocupación femenina insuficiente e inferior a la del entorno europeo; que la resolución de estas contradicciones exige el replanteamiento de los papeles familiares del hombre y la mujer, algo insoluble a su vez sin plantear una nueva distribución del tiempo que modifique la parte dedicada al trabajo, a la familia y a las actividades sociales. También explicaron que las nuevas políticas de apoyo a la familia crean una gran cantidad de puestos de trabajo y se constituyen en un nuevo sector económico.

Pero todo esto no es un invento. Maragall y la consejera de asuntos sociales de su gobierno alternativo, la diputada por Girona Marina Geli, explicaron que el modelo que proponen lo aplican desde hace ya muchos años los gobiernos socialdemócratas nórdicos. Tienen estos objetivos: facilitar la incorporación de la mujer al trabajo, la formación de nuevas familias y la decisión de tener los hijos deseados, y avanzar en la igualdad de responsabilidades y en la corresponsabilización de los padres.

La prestación económica anual directa y universal de 600 euros por hijo menor de seis años año propuesta por Maragall obedece al principio de que 'los hijos son un valor individual y colectivo'; la creación de 30.000 plazas de guarderías públicas, al principio de que los servicios socioeducativos 'son un derecho' y una herramienta imprescindible 'para conciliar la vida laboral y familiar de las madres'; el aumento de las prestaciones de asistencia domiciliaria, a que se considera un derecho, una consecuencia lógica de la prolongación de la vida y una exigencia para liberar a la mujer de esta responsabilidad.

La propuesta de apoyo a las familias incluirá también medidas de política de vivienda y un plan contra la pobreza y la exclusión social. Maragall anunció que el 19 de febrero presentará su propuesta alternativa para la tercera edad, destinada a garantizar una vejez digna.