El SCH prescinde de tres representantes extranjeros tras el recorte del consejo
El Santander Central Hispano (SCH) propondrá en su próxima junta de accionistas reducir de 25 a 19 el número de miembros que integran su Consejo de Administración. El Consejo, que se celebró ayer en Santander, acabó de deshojar la margarita y dejó fuera a los seis consejeros siguientes: Pedro Ballvé, presidente de Campofrío; Felipe Benjumea, copresidente de Abengoa; Gonzalo Hinojosa, presidente de Cortefiel; Harry P. Kamen, representante de la aseguradora Metropolitan Life; Axel von Ruedorffer, representante del Commerzbank, y Antonino Fernández, presidente del grupo mexicano Modelo. Cuatro consejeros procedían del BCH y dos del Santander. A todos les cumple el mandato. Continúan Fernando de Asúa y Manuel Soto, cuyos nombres también se barajaron.
El Consejo, que fijó para el 9 de febrero la junta de accionistas y la convención de directivos -que será cerrada a los periodistas después de dos años abierta- el día 7, aprobó la salida del presidente de Bankinter, Jaime Botín, de la comisión ejecutiva, aunque se mantendrá como vicepresidente segundo del SCH y consejero. Con estos cambios se cierra la crisis que supuso la marcha del copresidente José María Amusátegui y del vicepresidente cuarto, Santiago Foncillas.
Emilo Botín ha eliminado la representación de dos aliados considerados hasta ahora estratégicos, MetLife y Commerzbank. La entidad alemana disponía en junio del 2,4% del SCH, mientras que la entidad española contaba con el 4,8% de su socio. El banco parece centrar su apuesta por Royal Bank of Scotland, cuya alianza ha reportado a ambos beneficios mutuos.
Por lo que respecta al francés Société Générale y al italiano San Paolo-IMI, fuentes del mercado creen que venderá parte de sus participaciones actuales, con el fin de obtener plusvalías que ayuden a la cuenta de resultados.
El año pasado, el Santander Central Hispano abandonó el Consejo del San Paolo-IMI y redujo su participación del 5,10% al 4,45% en Société Générale, pese a que tenía el compromiso de incrementarla hasta el 7%. De los acuerdos conjuntos, que abarcaban a cuatro áreas de negocio, sólo los relacionados con la banca privada han seguido adelante.
La cotización de los títulos de Santander Central Hispano retrocedieron ayer 3,33%, por encima de lo que hizo el Ibex 35, que cayó un 2,29%. El cambio máximo al que se cruzaron operaciones sobre este valor fue de 8,98 euros, mientras que el precio mínimo que pagaron los inversores por acciones de la entidad fue de 8,62 euros. Al final cerró a 8,71 euros.
A precio de cierre de ayer, el banco que preside Emilio Botín registra una capitalización bursátil de 40.579,89 millones de euros (6,75 billones de pesetas), 1.382,33 millones de euros (230.000 millones de pesetas) menos que el viernes de la semana pasada. La crisis que se vive en Argentina ha sido la causa de estos retrocesos.
Prejubilaciones en la banca
El Banco de España autorizó al BBVA y al SCH a prejubilar a 3.500 empleados con cargo a las reservas de las entidades en 2001. El BBVA ha prescindido de 1.900 trabajadores con 53 o más años. La operación ha tenido un coste de 510 millones de euros (85.000 millones de pesetas), ya que se estima que cada empleado exige una dotación de 270.000 euros. El Santander Central Hispano ha reducido su plantilla en 1.600 trabajadores con un coste de 432 millones de euros (72.000 millones de pesetas). Durante este ejercicio, la entidad tiene planeado cerrar 300 oficinas, lo que supondría prescindir de casi 2.000 empleados. Los dos grandes bancos deberán negociar con el Banco de España si les autoriza o no cargar estas prejubilaciones contra la cuenta de resultados de 2002.
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