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Vía Digital intenta rebajar los 180 millones de euros que le costó el Mundial

El operador español compró el torneo a Kirch por la misma cifra que otras TV europeas abonaron por dos ediciones

Vía Digital pretende negociar con el grupo alemán de Leo Kirch para intentar una rebaja en el precio pagado por los derechos del Mundial de 2002, casi 180 millones de euros (30.000 millones de pesetas). En 1999, Vía Digital, que aún no ha vendido los partidos en abierto para España, fue el primer operador en comprar los derechos a Kirch. Dos años después, algunas cadenas europeas han pagado algo menos que la plataforma de Telefónica y, además, por dos Mundiales, los de 2002 y 2006 en Alemania. La ley impide a Vía dar los encuentros de España.

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Vía Digital ha entablado una negociación con Kirch para intentar rebajar el precio del Mundial de 2002, toda vez que otros operadores europeos han pagado una cuenta inferior por dos campeonatos, según afirmaron fuentes próximas a las conversaciones. Además, a cinco meses del torneo de Corea y Japón, Vía aún no ha podido comercializar en España los derechos en abierto, como le exigen tanto la ley como la FIFA. Algunos dirigentes de Antena 3 TV, cuyo principal accionista, Telefónica Media, es el mismo que el de Vía, se resisten a aceptar el precio exigido por su hermana digital. TVE, estrangulada por una deuda que roza los 4.800 millones de euros (800.000 millones de pesetas), no puede llegar a los 90,1 millones de euros (15.000 millones de pesetas) exigidos por Vía, según fuentes del canal estatal. Lo contrario sólo sería posible a costa de las arcas públicas.

Vía Digital fue el primer operador en compensar a Kirch parte de la descomunal cifra que en 1996 pagó el grupo alemán a la FIFA: alrededor de 1.683 millones de euros (280.000 millones de pesetas) por la exclusividad de los Mundiales de 2002 y 2006 (Alemania). La FIFA aceptó sin rechistar el talón de Kirch y dio de lado a la Unión Europea de Radiodifusión -organismo que agrupa a la mayoría de las cadenas públicas-, hasta entonces vehículo habitual para la difusión de estos campeonatos. A la FIFA, que por el Mundial de 1998 había recaudado 138,2 millones de euros (23.000 millones de pesetas), no le asustó que la estrategia de Kirch fuera vender los partidos a canales de pago, en detrimento de audiencias masivas. Los dirigentes del fútbol, deslumbrados por la hucha alemana, se limitaron a garantizar que el partido inaugural, las semifinales y la final debían difundirse obligatoriamente en abierto.

En mayo de 1999 Vía pagó poco menos de 180 millones de euros (sobre 30.000 millones de pesetas) por todos los derechos para España del Mundial asiático y se garantizó una opción de compra sobre el torneo de 2006. Una cifra extraordinaria si se tiene en cuenta que a TVE le costó el Mundial de Francia unos 4,8 millones de euros (800 millones de pesetas), si bien es cierto que sólo para la emisión gratuita. 'Lo que hemos pagado es una cantidad importante, pero razonable', dijo entonces el presidente de la plataforma de Telefónica, Juan Ruiz de Gauna.

A la fecha de la compra, en Vía ya eran conscientes de que no podrían emitir la parte más suculenta del pastel, los partidos de España, si es que se clasificaba para la cita mundialista. La denominada ley del fútbol, impulsada en 1997 en defensa del 'interés general' por el entonces vicepresidente del Gobierno, Francisco Álvarez Cascos, impide emitir en un sistema de pago los partidos de la selección de Camacho.

La plataforma de Telefónica se ha encontrado con otra situación diabólica. Fue el primer operador en comprar los derechos, pero al resto le ha beneficiado dar largas a Kirch durante estos años. En los principales países comunitarios los contratos no se han cerrado hasta el pasado año y los contratantes han pagado menos que Vía, incluso con mayor audiencia potencial. Además, se han garantizado buena parte del Mundial de 2006, sobre el que el operador español anunció en su día que sólo tiene una opción de compra. El canal francés TF-1 ha pagado por todos los encuentros de 2002 y 24 partidos de 2006 unos 168,2 millones de euros (28.000 millones de pesetas). La RAI italiana desembolsó 154,4 millones de euros (25.700 millones de pesetas) a finales de 2001 por el torneo completo de 2002 y 24 encuentros de 2006. En Alemania, donde tuvo que intervenir el canciller, Gerhard Schroeder, para evitar la ira popular si el Mundial se codificaba, ZDF y ARD han pagado 127,7 millones de euros (21.250 millones de pesetas) por el campeonato asiático. En el Reino Unido, BBC e ITV han invertido 255,4 millones de euros (42.500 millones de pesetas) por los dos próximos torneos completos.

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