La Diputación de Álava pagará el mismo cupo que en 2001

La Diputación de Álava se desmarcó ayer de las cifras de cupo barajadas tanto por el Gobierno vasco como por el central y decidió abonar la misma cantidad que el año pasado, es decir su parte proporcional de los 174.000 millones de pesetas pagados por la comunidad autónoma. Esa cifra es de 173,5 millones de euros (28.880 millones de pesetas) El portavoz del Gobierno, Josu Jon Imaz, advirtió al ministerio de Hacienda de que no intente cobrar mediante 'triquiñuelas' la diferencia de 40.000 millones de pesetas que separa a ambas administraciones.

La Diputación foral de Álava se desmarcó ayer una vez más de la postura del Gobierno vasco en la polémica derivada de la ruptura de las negociaciones del Concierto Económico. Señaló que su aportación al Estado estará basada en el cupo del año pasado situado en 174.000 millones de pesetas, frente a los 151.000 millones de pesetas (907 millones de euros) que pretende abonar el ejecutivo autónomo en estos momentos y los 191.000 (1.148 millones de euros) que preven los presupuestos generales del Estado.

De esta manera, si en el mes de mayo, fecha en la que se debe ingresar el primero de los tres plazos en que se paga en cupo, no se ha alcanzado un acuerdo entre las instituciones vascas y la administración central, Álava abonara un tercio de los 173,5 millones de euros (28.880 millones de pesetas) que le correponderían. De basarse en la cantidad fijada por el ejecutivo vasco (151.000 millones de pesetas), a Álava le tocaría desembolsar 153,7 millones de euros (25.500 millones de pesetas).

La decisión alavesa introduce la incógnita del destino qué dará el Gobierno vasco a los 20 millones de euros (3.300 millones de pesetas) que, según su criterio, estaría pagando de más la entidad foral. El mecanismo del abono del cupo establece que las diputaciones ingresen cada una su parte al Gobierno vasco y éste remita el total, en el mismo día, al Ministerio de Hacienda.

La Diputación alavesa considera que su decisión se ajusta a la legalidad, tanto por ser la partida provisional consignada en los presupuestos forales, ya aprobados, como en el Consejo Vasco de Finanzas (CVF) el pasado 15 de octubre. Un portavoz del departamento de Hacienda de la Diputación de Vizcaya reconoció que también en ese territorio la cantidad consignada como cupo en el proyecto de presupuestos, pendiente de aprobación aún, se ha calculado sobre la base del pago del año pasado y el mismo acuerdo del CVF. Por su parte, la Diputación de Guipúzcoa, aún no ha elaborado su proyecto presupuestario, donde deberá concretar la asignación económica de esta provincia al cupo del Estado.

El teniente de Diputado general de Álava, Carlos Samaniego y el responsable de Hacienda, Juan Antonio Zárate, que presentaron ayer una declaración institucional, descartaron por ahora una negociación individualizada con Madrid: 'Son posiciones que no han sido planteadas por esta Diputación, y no queremos hacerle el caldo gordo a Arzalluz cuando habla de provincias traidoras', señaló Samaniego. Sólo se podría llegar a esa situación, dijeron, 'si se planteara una prórroga de la prórroga del Concierto' a finales de año.

Poco antes del anuncio de Rabanera, el portavoz del Gobierno vasco Josu Jon Imaz reiteró que el ejecutivo sólo pagará 907 millones de euros (151.000 millones de pesetas) en concepto de Cupo, con lo que aseguró 'cumplimos la ley'. 'Pagaremos lo que está establecido en la ley de Cupo', añadió. Imaz advirtió de que la sociedad vasca 'responderá' si el Gobierno central utiliza 'triquiñuelas', en referencia a posibles descuentos de cantidades destinadas a Euskadi a través del IVA o fondos europeos, para cobrar los 1.148 millones de euros exigidos por Madrid.

El portavoz siguió reclamando a la Administración central una respuesta a la última propuesta del Gobierno vasco para retirar del Concierto la discusión sobre la presencia vasca en órganos ejecutivos de le Unión Europea. 'Si no responde, se vería que no hay voluntad de negociar. Y eso sería grave'.

La diputación de Guipúzcoa apoyó al ejecutivo en este requimiento de respuesta al Gobierno central y fuentes cercanas al diputado general, Román Sudupe, indicaron además que no contempla en ningún caso la posibilidad de negociar directamente con el Gobierno central, informa Mikel Ormazabal.