Montoro dice que si fracasa el acuerdo sobre el Concierto negociará con las diputaciones

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, aseguró en la mañana de ayer a Radio Euskadi que si no es posible un acuerdo sobre la renovación del Concierto Económico en la actual negociación entre ambos ejecutivos, no descarta que se pueda plantear una negociación final con las diputaciones, en la que, recordó, 'reside la soberanía fiscal'.

Montoro apuntó que 'sería deseable' que las administraciones vasca y central pudieran alcanzar un acuerdo para renovar el Concierto antes de fin de año, pese a que dicho acuerdo no pudiera estar en vigor el 1 de enero como debiera haberse producido. A pesar de todo, para el ministro la consecución del acuerdo 'tendría un valor' y sería interpretado por los ciudadanos como un hecho positivo.

El portavoz del Gobierno, Josu Jon Imaz, se refirió a la reanudación de esa negociación y aseguró que el Ejecutivo autónomo se empeñará en llegar a un acuerdo, informa Isabel C. Martínez. Pero Imaz consideró impracticable e inconstitucional la posibilidad barajada por el ministro de Hacienda de negociar directamente con las diputaciones si el acuerdo con el Gobierno vasco resulta inviable. 'No tiene sentido, ni pies, ni cabeza', dijo Imaz, porque Euskadi tiene un único sistema tributario, aunque la ejecución la realicen las tres diputaciones. El portavoz del Ejecutivo añadió rotundo que esa actuación sería 'inconstitucional y antiestatutaria'.

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, advirtió al ministro de que los dos diputados generales nacionalistas nunca negociarán por su cuenta e insistió en que el Concierto no permite la prórroga unilateral adoptada por el Gobierno, que calificó de 'unilateral, autoritaria y solitaria'.

Medida necesaria

Montoro defendió la aprobación de la prórroga como una medida necesaria, que proporciona cobertura legal a partir del 1 de enero de 2002 y que impide que 'un montón de ciudadanos puedan presentar pleitos contra las diputaciones, distorsionando ante el vacío legal la capacidad tributaria y de cobro de impuestos que tienen las instituciones forales en los territorios históricos'.

Sin embargo, Imaz tras criticar lo que calificó de 'posturas inamovibles' de la Administración central, reiteró que la parte vasca mantendrá una actitud 'flexible', pero igualmente 'firme en la defensa de los intereses económicos' de los ciudadanos de Euskadi. El portavoz no se refirió para nada a la presencia vasca en las instituciones europeas.

El ministro recalcó que la prórroga permite mantener el sistema actual, la misma legislación y una previsión de cálculo de Cupo para 2002 igual a la de 2001, de unos 173.000 millones de pesetas. Por ello, calificó de 'muy desafortunadas' las declaraciones del lehendakari, Juan José Ibarretxe, en relación al Cupo. Montoro resaltó que con la prórroga 'todo continua igual' y criticó por 'absurdo' que desde el Gobierno vasco se demande su rebaja cuando 'no existe ningún motivo para que se baje' y sí para actualizarlo al alza. En este sentido indicó que la cifra que propone se sitúa en 188.000 millones de pesetas.

El ministro de Hacienda explicó además que las diferencias principales que existen en la negociación del Concierto son la cuantificación económica del Cupo y en materia de la Unión Europea la forma de 'concebir lo que debe ser la defensa de la comunidad autónoma'.

Montoro destacó cómo a lo largo de las negociaciones se había logrado promover hasta 68 cambios 'beneficiosos' en materia tributaria, cambios que a su juicio eran 'muy importantes' y que permitían avanzar en el autogobierno, en materia fiscal y en materia tributaria. Igualmente recordó que se habían promovido sistemas que permiten evitar los conflictos ante los tribunales.

La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, y los tres diputados generales, Ramón Rabanera (Álava), Román Sudupe (Guipuzcoa) y Josu Bergara (Vizcaya), mantuvieron ayer por la tarde un encuentro preparatorio del que deben mantener con la Administración central.