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LA PALABRA
Columna
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Micropago

Una tendencia actual de la WWW es cobrar por servicios y contenidos que habían venido siendo tradicionalmente gratuitos. Mientras que la discusión sobre si esta postura prosperará o no se puede hacer interminable, podríamos analizar algunos términos y conceptos implicados.

La clave para el comercio electrónico de muchos contenidos es sin duda el micropago (del inglés micropayment). Un texto inglés de 1998 distinguía las siguientes categorías: macropagos, hasta 1.000 libras esterlinas; minipagos, de 10 a 1.000 libras; micropagos, de un penique a 10 libras; nanopagos, de menos de un penique.

Macro es griego, y significa 'grande' (como en macrobiótica); mini es latín (viene de minimus) y significa 'pequeño', como en minifalda; micro es griego y significa 'muy pequeño' (como en microbio); nano (del latín nanus, 'enano') significa 'minúsculo'.

Los sistemas para realizar micro- (o nano-) pagos se pueden reducir a dos: los que tienen como base la tarjeta de crédito normal, y los que exigen un sistema de prepago específico (como en los teléfonos móviles). También hay intermediarios exclusivos de pago, como Paypal. Los límites mínimos de cada sistema pueden variar según la demanda o los deseos de sus gestores. Uno de los sistemas más utilizados hoy, el Honor System, ligado a la librería Amazon, tiene un pago mínimo de un dólar.

Sea cual sea el medio que se implante en el futuro, es muy posible que los mini-, micro- o nanopagos supongan una importante posibilidad tanto para sitios no comerciales (que permitirán a sus gestores recaudar el dinero necesario para su mantenimiento) como para los sitios dedicados al menudeo de mercancías digitales (venta de escritos, de canciones de un grupo, o de vídeos de un realizador).

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