La cooperación, el gran tema pendiente del modelo de Estado
El importante desarrollo del Estado de las autonomías ha decidido al PP a situar en primer plano la cooperación entre los gobiernos autónomos. Con una ley de cooperación, que empezará a debatirse en febrero, tratará de apuntalar el Estado de las autonomías y resolver sus flecos pendientes: la reforma del Senado, participación en Europa y descentralización municipal.
Reforma del Senado. La reforma del Reglamento del Senado de 1994 ofrece cauces suficientes para profundizar en su vocación de Cámara territorial sin necesidad de una reforma constitucional. El responsable autonómico del PP, Esteban González Pons, propone tres líneas de avance:
- Acordar con el Congreso que los grandes debates territoriales (Plan Hidrológico Nacional, financiación autonómica, traspasos de la Sanidad...) se realicen en el Senado y que las leyes de vocación autonómica se debatan en la Cámara alta.
- Lograr que los presidentes autonómicos puedan acudir a los debates del Senado, con voz.
- Instituir dos debates sobre el Estado de las autonomías por legislatura: uno al inicio y otro al final. Cada uno de ellos recogería debates sectoriales y un gran debate final sobre cooperación.
Participación autonómica en foros europeos. Las comunidades autónomas han aumentado su presencia en los comités de apoyo de la Unión Europea. El debate político está centrado en la elección de la fórmula de participación autonómica en los Consejos de Ministros de la Unión. El PP prefiere que sea en un organismo multilateral, como la Conferencia para Asuntos Relacionados con las Comunidades Europeas (CARCE), donde se fije la voluntad autonómica y que sea el Gobierno central quien la traslade a Bruselas. La presión socialista y nacionalista ha obligado al PP a aceptar un grupo de trabajo, dependiente de la CARCE, que estudia fórmulas de participación autonómica en el Consejo de Ministros. El PP pone dos condiciones: la cabeza de la representación exterior será del Estado y la fórmula participativa debe lograr un consenso total.
Descentralización local. El desarrollo autonómico ha engrosado el poder de las comunidades autónomas en detrimento de los municipios, que han perdido peso en competencias y gasto. Con la sanidad traspasada a las autonomías, los municipios no llegan a administrar el 15% del gasto público frente al 45% de las autonomías y al 40% de la Administración central.
Cooperación. La gran descentralización de poder a favor de las autonomías requiere mecanismos de cooperación entre sus gobiernos con la potenciación de las conferencias sectoriales. El PP propone también la creación de una conferencia de presidentes autonómicos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Política nacional
- Congreso PP 2002
- Relaciones Gobierno central
- Cortes Constituyentes
- Relaciones autonómicas
- Senado
- Congresos PP
- Federalismo
- Consejo UE
- Debate estado nación
- Congresos políticos
- Debates parlamentarios
- PP
- Reformas políticas
- Partidos políticos
- Política autonómica
- Comunidades autónomas
- Parlamento
- Ideologías
- Administración autonómica
- Unión Europea
- Organizaciones internacionales
- Política municipal
- Política
- España