La deuda que acumula la Federación Madrileña de Esquí dejará a 1.000 deportistas sin competir

La Federación Madrileña de Deportes de Invierno (FMDI) acumula una deuda de 50 millones, lo que le ha colocado en quiebra técnica. Sus gestores afirman que si en este mes no reciben ayuda económica del Gobierno regional, la federación cerrará. La deuda ha provocado la dimisión del presidente de la federación, Eduardo Uzquiano. Hace una semana una junta gestora tomó el mando de la entidad, que tiene 6.000 federados, de los cuales 1.000 compiten. Si la federación cierra, estos deportistas dejarán de participar en campeonatos, ya que sus inscripciones no se podrán tramitar.

La Federación Madrileña de Esquí coordina la actividad de 6.000 federados y de 22 clubes, que incluyen también las modalidades de esquí alpino y de fondo, patinaje sobre hielo, perros con trineo y snowboard.

Los problemas en la federación, según su actual junta gestora, comenzaron en 1991, año en que empezó a acumularse una deuda que ya alcanza los 50 millones de pesetas. 'Ese año se comenzó el ejercicio con 12 millones de superávit, pero la junta directiva gastó más de lo que ingresó', explicaron fuentes de la federación.

En junio de este año, el presidente de la Federación, Eduardo Uzquiano, y la junta directiva dimitieron debido a la situación económica de la entidad. Los 42 miembros de la Asamblea de la Federación Madrileña de Esquí decidieron crear una junta gestora para intentar 'sacar de las cenizas' a un organismo que aglutina a 6.000 federados, entre ellos a cerca de 1.000 deportistas de competición. 'Desde septiembre hemos mantenido varias reuniones para ver cómo sacábamos adelante la situación y hace una semana formamos la junta gestora en la que estamos siete personas', explica su presidente, Felipe Aguirre. 'Arrastramos una deuda que, con nuestras fuentes de ingresos, no podemos sufragar. Además, debemos sumar a esta cantidad 12 millones más correspondientes a las indemnizaciones que se le deben al personal que fue despedido cuando dimitió la junta directiva', añade.

El presupuesto con el que cuenta la Federación para el año que viene es de 44 millones que proceden de ayudas institucionales -de la Federación Española de Deportes de Invierno y del Gobierno regional-, de las cuotas de los federados -40.000 pesetas anuales cada deportista- y de los ingresos del seguro que ofrece esta entidad -7.000 pesetas anuales por persona-. A esta póliza tiene acceso cualquier persona que quiera practicar este de-porte.

Según la junta gestora, este dinero es insuficiente y necesitan una ayuda oficial para evitar el cierre. 'Nos hemos reunido en varias ocasiones con el director general de Deportes , Alejandro Sanz, para exponerle nuestra situación. Necesitamos 25 millones para este año y 25 para el que viene porque nuestra situación es de quiebra técnica. Si en este mes no obtenemos viabilidad económica, tendremos que dejar de funcionar como federación', señala Miguel Lafuente, secretario de la junta gestora.

Sanz, por su parte, asegura que la única manera que tiene el Gobierno regional para ayudar a la federación es a través de la convocatoria pública de subvenciones. 'Les dimos una pequeña ayuda de carácter extraordinario para que pusiesen en marcha un plan de viabilidad y les hemos ofrecido unas instalaciones en el estadio de La Peineta para que tengan allí su sede', explica Sanz. Y añade: 'La vía legal para ayudarles económicamente es que pidan una subvención, pero nunca podremos darles los 25 millones anuales que piden porque tenemos un presupuesto de subvenciones de 200 millones para un total de 59 federaciones'.

Para Sanz, la Federación Madrileña de Esquí tiene que buscar otra alternativa de financiación a través de patrocinadores privados y resolver los problemas internos que tiene. 'El primer paso es que pongan disciplina a la gestión de la Federación', comenta el director general de Deportes.

Fuera de los campeonatos

La situación es límite, señalan fuentes federativas. 'Si desaparecemos, los 1.000 deportistas que dependen de nosotros no podrán competir a nivel nacional porque nosotros somos los que gestionamos las inscripciones', explica Lafuente.

Entre los 1.000 deportistas que están a punto de quedarse sin competir hay figuras con gran futuro en el patinaje artístico, como Inés Ortiz, de 14 años, ganadora del campeonato infantil del año pasado, y Juan Ramón Blanco Fernández-Coppel, de 16 años y campeón de España infantil de esquí alpino en 1999. 'A partir de los 17 años no tenemos gente compitiendo porque, al ver el desastre que había en la Federación, la gente se ha ido desanimando y ha abandonado', asegura el presidente de la junta gestora, Felipe Aguirre. 'Pero el problema no son sólo los que compiten. En Madrid esquían 400.000 personas, que también se verán afectadas si buscan asesoramiento o si quieren tramitar con nosotros un seguro de accidente', concluye.