Las familias con niños en régimen de acogida critican el retraso del dinero

Las ayudas que la Consejería de Bienestar Social concede mensualmente a las familias que cuentan en sus hogares con niños en régimen de acogimiento no han llegado a su destino hasta el pasado julio, pese a que la ley establece que deben ser abonadas a final de mes. El retraso en la percepción de esta cuantía económica es el principal caballo de batalla de la Asociación de Voluntarios de Acogimiento Familiar (AVAF) con la consejería. El año pasado 'hubo familias que no recibieron ni una peseta hasta bien entrado octubre', según David Manzanas, vicepresidente de AVAF.

En la Comunidad los niños de acogimiento son más de 200 y las familias que se hacen cargo de su custodia encuentran un gran número de inconvenientes. Cada uno de los niños que no tienen necesidades especiales recibe al mes una cantidad en torno a las 42.000 pesetas, cantidad que aumenta si precisa de atenciones especiales (síndrome de Dawn, seropositivos...). Pero al retraso en el abono de las ayudas se une el hecho de que los niños acogidos computan a efectos legales como si fueran hijos propios. 'Ello impide en la mayoría de los casos acceder a cualquier tipo de beca' señala Manzanas.

La normativa establece las ayudas en función de los ingresos de cada familia, una situación que no comparten desde la asociación. 'Si en un matrimonio trabajan los dos, los ingresos superan el mínimo y no te conceden ninguna beca. Si por el contrario sólo trabaja uno, lo que ocurre es que no hay dinero para el acogimiento' apunta una mujer que tiene a su cargo tres niños. Desde AVAF se ha planteado una alternativa. ' Queremos que el niño sea el beneficiario de las ayudas, no la familia. De este modo la ayuda iría siempre con el niño, incluso cuando éste cambie de familia, sin depender de los ingresos de éstos', explica Manzanas.