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OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Regionales de Renfe

Parece ser que la política de Renfe tan sólo ha quedado en ocuparse de los trayectos que no puede cubrir ningún otro medio de transporte, como es el AVE y ciertos trayectos de cercanías. En el resto de los trayectos, aunque podría hacerlo en menos tiempo y de forma más barata, más segura, más cómoda y más ecológica que cualquier otro medio de transporte, simplemente se retira, se deja morir, a mi juicio movido por quién sabe qué intereses.

Esto es especialmente patente en casos como la línea Granada-Sevilla, donde, a pesar de tener una vía de reciente remodelación y nuevos trenes, que garantizan comodidad y rapidez, el autobús sigue llevando muchos más clientes. ¿Cómo es posible? Está claro, por el servicio. A prácticamente cada hora salen autobuses, nunca hay problemas de plazas, tienen un confort aceptable, no ponen pegas para el transporte de equipaje voluminoso y suele ser fácil el enlace con otras líneas. Los trenes sólo salen cuatro al día, el aire acondicionado llega a hacer tiritar, está prohibido llevar grandes bultos como bicicletas y no quiero comentar los problemas que hay para enlazar con otras capitales, como Huelva. Aún así, la gente entiende que es un buen servicio y lo demanda. Tal es el éxito que casi nunca hay plazas salvo que se reserve. Y esta situación no es nueva, se arrastra desde hace varios años, desde que se implantaron los TRD.

A primeros de julio formulé una hoja de reclamaciones manifestando mi indignación ante esta perenne falta de plazas. Escribo a continuación la respuesta recibida a fecha 11 de julio del presente año: 'Quiero informarle que a pesar del esfuerzo realizado para aumentar las composiciones de los trenes y dotar a las líneas del mayor número posible de servicios, existen las lógicas limitaciones de tipo presupuestario, que impiden hasta ahora cubrir la demanda existente, sobre todo con motivo del fin de semana'.

Hay dinero para vías, para trenes, para grandes empresas, pero para unos vagones que atenderían una demanda real, inmediata, y que les generaría beneficios, para eso no hay presupuesto.

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