El Ejército israelí mata a 10 palestinos al detener a dos presuntos asesinos del ministro

Cisjordania vivió ayer una de las jornadas más sangrientas desde que se iniciara la Intifada. En una ofensiva sin precedentes, con la participación de fuerzas de infantería, helicópteros y tanques, el Ejército israelí ocupó la pequeña localidad de Beit Rima, cercana a Ramala, donde fueron detenidos dos sospechosos del asesinato, hace una semana, del ministro de Turismo, Rehavam Zeevi.

Las tropas israelíes obligaron a todos los habitantes de Beit Rima a salir de sus casas y a concentrarse en la plaza principal de la localidad. Las milicias respondieron al ataque y seis palestinos murieron en los tiroteos. Otros cuatro fueron abatidos en los olivares cercanos, cuando trataban de huir, campo a través. EE UU pidió de nuevo al primer ministro israelí, Ariel Sharon, que ponga fin 'de inmediato' a la ocupación de las zonas palestinas de Cisjordania.