La UE pretende armonizar las leyes de inmigración

Racismo y xenofobia son comportamientos que se han hecho más patentes tras el 11 de septiembre. 'Hay que combatir el terrorismo, pero también la xenofobia y la intolerancia', advirtió ayer Ruud Lubbers, ex primer ministro holandés y actualmente Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en el curso de una reunión ministerial europea para impulsar una política común de la UE de inmigración y asilo.

Los Quince están de acuerdo en que hay que armonizar sin más dilación las legislaciones nacionales en materia de inmigración y asilo en el marco de lo acordado en la cumbre de Tampere (1999). España, que asumirá la presidencia de la UE el próximo enero, va a tenerlo como una de sus prioridades. 'Caminar hacia el sistema común de asilo será uno de los puntos que inspirarán nuestra actuación', declaró el vicepresidente y ministro del Interior, Mariano Rajoy, que asiste a la reunión junto al titular de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio.

Con la conmoción de la tragedia norteamericana bien presente, la UE comenzó ayer, a iniciativa de la presidencia belga, un foro de reflexión de dos jornadas para debatir todo lo relacionado con la gestión de los flujos migratorios: inmigración legal e ilegal, refugiados y solicitantes de asilo y cooperación entre la UE y terceros países, la lucha contra las mafias y los acuerdos para la readmisión de inmigrantes ilegales. Inaugurada por el rey Alberto de Bélgica en el Parlamento Europeo, a la conferencia asisten representantes de una treintena de países, entre ellos EE UU, Marruecos, China e India.

El comisario europeo de Justicia e Interior, António Vitorino, afirmó que los sucesos del mes pasado no deben frenar la política europea de inmigración. Vitorino, que en noviembre presentará ante el colegio de comisarios una comunicación sobre la xenofobia y el racismo, ha propuesto un método de coordinación abierta entre los Estados miembros en el tema de inmigración con el fin de llegar en un plazo breve a una política de convergencia.

'Hay que favorecer la inmigración legal y evitar la ilegal', declaró Rajoy, quien informó de la Ley de Extranjería española, que dijo, 'reconoce a los extranjeros un amplio estatus de derechos'. El ministro anunció que España va a redoblar la lucha contra el tráfico ilegal de personas dotando de mayores recursos a los consulados, así como a través de un sistema de vigilancia marítima y planes operativos.

España impulsará durante la presidencia de la UE la propuesta de directiva europea sobre petición de asilo, que regulará las normas mínimas sobre las condiciones de acogida, así como el desarrollo de un sistema informatizado que permitirá la comparación de huellas dactilares de los solicitantes de asilo (EURODAC). Este sistema se espera que empiece a funcionar en todo el territorio de la UE a principios del año que viene.