La oficina de Almería en Bruselas capta en su primer año 800 millones de programas de la UE

Quien no está en Bruselas no existe. Ésta es la máxima que, tras un año de presencia física en la capital administrativa de la UE, la Diputación de Almería ha sabido rentabilizar 'al máximo'. La captación de información para nuevos proyectos, previa a la publicación de las convocatorias oficiales, se destaca como la principal estrategia de trabajo. Conocer y que te conozcan puede reportar a provincias como la almeriense millones de pesetas en subvenciones. En torno a 800 millones se han captado hasta la fecha.

A esta carrera en solitario se sumó también la Diputación de Huelva, gobernada por el PSOE, que ha obviado igualmente a la oficina que la propia Junta de Andalucía tiene en la capital belga.

Antes de que acabe el año, la Diputación de Almería será beneficiaria con toda probabilidad de una subvención global por valor de 152 millones de pesetas que otorga el Ministerio de Administraciones Públicas con fondos europeos.

La sorpresa para la institución provincial sería no obtener dicho montante, que permitirá programar cursos de formación a 170 personas en la comarca de Nacimiento. Meses antes de que la convocatoria de dicha subvención fuese publicada en el Diario Oficial de las Comunidades Europeas (DOCE), los técnicos de la casa ya elaboraban el programa para que su propuesta no fuera eliminada entre otras aspirantes.

'A los tres días de publicarse la convocatoria en el DOCE la Diputación ya había entregado en registro el proyecto. De manera que, mientras otros organismos ni siquiera lo habían redactado, nosotros podíamos mejorar los defectos o flecos de nuestra propuesta', explica el diputado de Presidencia, Manuel Alías.

Subvención

Algo similar ocurrirá con la subvención del programa Interreg, valorada en 500 millones de pesetas y cuyo proyecto, a pesar de no haberse abierto aún la convocatoria, se ultima estos días por la Diputación almeriense.

La presentación de otro programa como el Equal, sin necesidad de recurrir a empresas consultoras -que facturan el 10% del dinero conseguido en cada subvención- justifica también la figura del director de la oficina almeriense en Bruselas.

Y es que conocer con meses de antelación requisitos o condiciones que pueden determinar la obtención de cientos de millones para una comarca sólo es posible con horas de roce y de 'hacer pasillos'.

Pasearse por las distintas direcciones generales y 'darse a conocer' aportan información sustancial que, en tan sólo un año de experiencia, la institución provincial ha rentabilizado en más de 800 millones de pesetas.

'No digo que no los hubiéramos conseguido sin la oficina en Bruselas, pero sí que nos ha sido mucho más fácil. Por algo más de seis millones de pesetas, que es el gasto que acarrea el estar allí, merece la pena tener la oficina', insiste Alías.

Durante este primer año de existencia dos delegaciones comerciales de empresarios de la provincia se han acercado a Bruselas con la misión de ampliar mercado y dar a conocer Almería.

En dichas expediciones, siempre sufragadas por los propios empresarios, se han firmado operaciones comerciales con importadores y distribuidores. Empresas como Cárnicas María han cerrado pedidos por valor de 12 millones de pesetas para exportar jamones de Hijate; mientras que Quesos de Fondón apalabraba más de un palé de queso en aceite con destino a Países Bajos.

'Esto es algo muy difícil de conseguir en nuestra primera salida al exterior, sobre todo en un mercado en el que se consume vaca y oveja, no leche de cabra', apuntaba el empresario de Fondón.

De forma paralela, la oficina almeriense ha celebrado dos recepciones en el Parlamento Europeo para dar a conocer la provincia a los distintos funcionarios y cargos de la Comisión Europea, algo que volverá a repetirse en noviembre, del 19 al 23, con la celebración de la Semana de Almería.