Los docentes catalanes son los peor pagados de España después de los gallegos
Los sindicatos amenazan con movilizaciones si no hay un acuerdo antes de noviembre
El Departamento de Enseñanza debe de más de 2.000 millones de pesetas a los 20.000 profesores que trabajan en escuelas privadas concertadas. La Generalitat lleva arrastrando la deuda desde enero del año 2000, fecha en la que se acordó un aumento de salario de un 1,3%. Los retrasos de todo el año anterior y los nueve meses de éste suponen una cantidad de 90.000 pesetas por profesor, esto es, una cifra global cercana a los 1.800 millones, a los que hay sumar lo que Enseñanza adeuda a los profesores que imparten el primer ciclo de Enseñanza Obligatoria Secundaria (ESO), que supone unas 130.000 pesetas por profesor afectado.
Tras casi dos años de espera, ahora los sindicatos del sector reclaman al Departamento de Enseñanza, cuya titular es Carme Laura Gil, que cumpla su compromiso y pague estos atrasos.
El Gobierno catalán siempre ha alegado que el pago de las cantidades retrasadas se haría después que los sindicatos de enseñanza y las patronales de los colegios privados llegaran a un acuerdo sobre el aumento de salario de estos profesores.
La firma de las nuevas tablas salariales, que prevé un incremento del 4% en sus nóminas, se rubricó el pasado viernes.
'La firma de este acuerdo con las patronales supone el desbloqueo del pago de la deuda del Gobierno de la Generalitat con los profesores de la escuela privada concertada', afirmó ayer Jaume Graells, secretario general de FETE-UGT de Cataluña, 'por lo que los sindicatos damos este asunto por resuelto, aunque físicamente aún no se ha cumplido'.
Graells recordó que el Departamento de Enseñanza, 'con excusas de mal pagador', alegaba 'error de previsión' cuando los sindicatos reclamaban el pago de la deuda contraída a lo largo de los últimos 22 meses.
A principios de este curso, UGT ya expresó su malestar por 'el poco interés demostrado' en el departamento que dirige la convergente Carme Laura Gil por el profesorado que enseña en los centros privados sostenidos con fondos públicos, 'que trabajan más horas con un salario inferior al de los docentes de la enseñanza pública'.
El año pasado, el Departamento de Enseñanza y los sindicatos llegaron a un nuevo acuerdo de analogía retributiva, lo que supone que en el año 2005 los profesores de la escuela privada concertada alcanzarán una homologación retributiva del 100% de su sueldo base respecto al del profesorado de la enseñanza pública.
Los profesores de enseñanza secundaria de la escuela privada concertada tienen 24 horas lectivas semanales, frente a las 18 horas de los de la pública, que cobran un 5% más además de los complementos por antigüedad, señalan los sindicatos. 'Por eso el Gobierno de la Generalitat potencia a la privada, porque trabajan más y cobran menos', concluye Graells.
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