El Ararteko recomienda a Zarraoa que anule su prohibición contra el nudismo

Laararteko, Mertxe Agundez, ha recomendado al Ayuntamiento de Getxo que anule su decreto de julio pasado en el que prohibió practicar el nudismo en las playas (salvo en La Salvaje) y campas del municipio, estableciendo multas de 25.000 pesetas a los infractores de la norma. La institución sostiene que el consistorio no tiene competencias en esa materia y aconseja al alcalde, el peneuvista Iñaki Zarraoa, que adopte medidas para la convivencia y el ejercicio de los derechos. La prohibición generó numerosas protestas.

El Defensor del Pueblo vasco ha dado la razón a la Asociación de Naturistas Vascos, que se opuso al decreto municipal del 12 de julio pasado que impedía el nudismo en la playa de Azkorri, y da un varapalo a la cerrazón de la alcaldía. Zarraoa estuvo ayer ausente del consistorio, según aseguró su secretaria a EL PAÍS, por lo que fue imposible preguntarle por la conclusión de la ararteko, Mertxe Agundez. En agosto pasado, aseguró que se sentía 'plenamente respaldado por una gran mayoría de la población' y consideró 'plenamente democrática, ya que no ha sido derogada' la norma de 1955, dictada en pleno franquismo, que, junto a otras, aducía en respaldo de su decreto municipal. Zarraoa rechazó entonces que los naturistas pudieran tener derechos adquiridos por el hecho de haber practicado el nudismo durante décadas en la playa de Azkorri.

A petición de la asociación, el Ararteko analizó la base legal de las restricciones y la ley que autoriza las multas coercitivas y concluye que el Ayuntamiento 'no dispone de habilitación legal para intervenir en la actividad de los particulares y obligar al uso de determinadas prendas de vestir en playas y municipios'. La institución argumenta que las competencias sobre las playas no habilitan al consistorio a regular sobre otro tipo de cuestiones que no sean las de salubridad pública y mantenimiento. Además, considera que el ordenamiento jurídico no penaliza la práctica del nudismo en espacios públicos y que tampoco existe una ley que establezca la imposición de multas coercitivas en ese ámbito.

Zarraoa tenía que conocer que su decisión era contraria a derecho ya que el Ayuntamiento contaba con tres informes legales que lo advertían. En ellos se avisaba de que el consistorio carece de competencias en materia de regulación de uso de las playas, según establece la Ley de Costas y que tampoco era legal el que ordenara a la policía local que amenazara a los nudistas con una multa si persistían en su actitud. El alcalde tampoco dispone de cobertura legal para sancionar conductas despenalizadas, como el nudismo.

Agundez llama a los poderes públicos para que establezcan medidas que permitan la convivencia. Asimismo, les insta a que garanticen el ejercicio tolerante de los derechos y libertades de las personas. La Asociación de Naturistas Vascos dudó de que Zarraoa acepte la recomendación ya que no es de obligado cumplimiento. 'Ya veremos qué hace', señaló un portavoz.