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El Consell rechaza un plan de ayuda a inmigrantes diseñado por la Unió

El programa funciona en otras autonomías

La Consejería de Economía rechazó una propuesta presentada por la Unió de Llauradors i Ramaders destinada a organizar la acogida y prestar servicios de ayuda a los trabajadores inmigrantes que acuden a las campañas de recogida del campo valenciano mediante la ayuda de educadores, trabajadores sociales y graduados sociales. Economía negó la ayuda para poner en marcha un programa existente en otras comunicades como Cataluña, Aragón o Andalucía.

La Unió de Llauradors i Ramaders presentó a principios de julio una solicitud para que los inmigrantes que participaran en las diversas campañas de recogida de fruta que tienen lugar en la Comunidad contaran con personal de ayuda que les asistiera en las necesidades que se presentaran. 'Es imprescindible disponer de educadores o trabajadores sociales que puedan desarrollar las funciones de supervisar y atender todas aquellas cuestiones que necesiten los temporeros', apuntaba La Unió en el escrito de solicitud presentado al Servei Valencià d'Ocupació i Formació (Servef) , dependiente de la Consejería de Economía, Hacienda y Trabajo.

El proyecto pretendía que los trabajadores pudieran acceder a servicios de ayuda que se prestan en otras comunidades acostumbradas a acoger trabajadores inmigrantes, como la andaluza, la catalana o la aragonesa. En estos lugares, asistentes sociales, educadores o graduados sociales se ocupan de acompañar al médico, al banco, explicar las condiciones laborales y de acogida, o de intermediar ante las necesidades que puedan tener los extranjeros. El Servef, sin embargo, no entendió que se tratara de un proyecto interesante y decidió excluirlo de las ayudas que presta por considerar que no era 'de los de mayor interés general y social'.

El responsable del área de migraciones de la Unió, Vicent Sanz, lamenta que los trabajadores extranjeros que acuden al campo valenciano no puedan contar con esta ayuda. Pero tampoco otras como la que están llevando adelante gobiernos regionales en Aragón, La Rioja o Cataluña, donde se emplea el dinero público para crear albergues o rehabilitar casas para que los empleados cuenten con alojamiento en condiciones. Sanz destacó ayer que la negativa de la Generalitat no se limita a no subvencionar estas ideas. Desde la Unió de Llauradors se solicitó hace meses una reunión con el consejero de Economía, Vicente Rambla, y con el presidente de la Generalitat, para transmitirle el plan ocupacional que diseñaron dirigido a cubrir la asistencia social de los extranjeros. 'Hemos obtenido la callada por respuesta', apunta Sanz.

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