La UE reforzará la cooperación con Washington en materia de Competencia
La Unión Europea (UE) no sólo ha puesto a disposición de Estados Unidos toda la ayuda necesaria para combatir el terrorismo internacional. Bruselas quiere reforzar la cooperación con Washington, especialmente en el área de Competencia. Además, los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro analizarán hoy el impacto del ataque terrorista al corazón financiero mundial en el crecimiento, en una reunión en la que participarán excepcionalmente los países que están fuera de la moneda única.
El comisario europeo de Competencia, Mario Monti, se reunirá este lunes en la capital estadounidense con Charles James, asistente de la Fiscalía General de Competencia, y Timothy Muris, presidente de la Comisión Federal de Comercio. Su objetivo es estrechar la colaboración de los guardianes antimonopolio de ambos lados del Atlántico.
En otro encuentro, que se celebrará hoy en Lieja, la Comisión Europea tiene previsto presentar ante los Quince un análisis global de la situación económica, con especial atención a la crisis en los sectores del transporte aéreo, de la energía y de los seguros. Además, se analizará cómo afectan todos estos eventos a las finanzas públicas europeas. Las conclusiones del Eurogrupo pasarán al Consejo Europeo reunido con carácter extraordinario en Bruselas.
Cambio de planes
La presidencia belga en convocó está reunión informal de los ministros de Economía con el objetivo de presentar por primera vez al público, conjuntamente, las nuevas monedas y billetes de euros que en apenas 100 días empezarán a circular por las manos de los ciudadanos europeos. Pero este evento quedará en un segundo plano después del atentado del 11 de septiembre en EE UU. El temor a una desaceleración mayor de la economía y las medidas a adoptar para reducir al máximo los riesgos de una recesión mundial centrarán los debates del Eurogrupo y de mañana en el Ecofin informal.
La UE se daría ya con un canto en los dientes si el crecimiento para este año se situara en torno al 2% del PIB y en Bruselas ya se acepta sin ningún pudor que la situación después del atentado no será mejor que antes, que ya estaba siendo peor de lo previsto.
El impacto real del trágico evento en Estado Unidos en la economía europea es difícil de evaluar aún y todos confían en la recuperación de la economía estadounidense para salir de la crisis. Pero ante esta desaceleración tan pronunciada a corto plazo vuelve a escena con más fuerza la petición de algunos Estados miembros de flexibilizar el cumplimiento de los objetivos del pacto de estabilidad.
