Pujol ofrece ayuda a Seat, pero exige un presidente 'con plena dedicación'

El Gobierno catalán está dispuesto a ayudar a Volkswagen para que reconvierta Seat en una marca más deportiva, una especie de Audi del Mediterráneo. Desde Alemania, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, puso ayer a disposición del grupo alemán dos centros de I+D controlados por la Administración para amarrar inversiones de Volkswagen. Pero exigió que el próximo presidente de Seat 'se juegue el tipo' por la empresa y le dedique el 100% de tiempo.

Tras reunirse con el actual presidente de Volkswagen, Ferdinand Piëch, y también con su futuro sucesor, Bernd Pischetsrieder, Pujol remarcó que el grupo alemán debería nombrar en su filial española Seat a un 'presidente que se juege el tipo' por la que es la mayor compañía radicada en Cataluña (factura más de un billón de pesetas y cuenta con 15.000 empleos directos y unos 45.000 indirectos) y que no tenga 'limitaciones ni de tiempo ni de dedicación'.

Fue un claro toque de atención a la labor realizada por Pischetsrieder, que, pese a que para Pujol ha sido 'un buen presidente', ha creado 'un cierto desconcierto al haberse ocupado más de Volkswagen que de Seat, lo que es lógico'. Pujol se refería al hecho de que el actual presidente de Seat, que ocupa este cargo desde mediados del año pasado, está llamado a asumir la dirección de todo el grupo. Lo hará en el mes de abril del año próximo.

'Hemos tenido una situación transitoria de la que nosotros no éramos conscientes, pero ellos sí, pues la jugada ya estaba planeada', insistió Jordi Pujol, antes de exigir que el sucesor de Pischetsrieder, con el que se volverá a reunir antes de que finalice este año, 'tiene que vivir en Barcelona o Cataluña, porque esto no se puede repetir'.

Durante la reunión, tras la que desde Volkswagen no se quiso hacer ningún tipo de comentarios, no se barajaron nombres para un posible sucesor a Pischetsrieder, según Pujol.

Por su parte, fuentes del Gobierno catalán aclararon que la oferta de la Generalitat al grupo Volkswagen 'no es económica'. Pujol puso a disposición del consorcio el Idiada y el Laboratorio de Ensayos, centros que dependen de la Generalitat.

La aportación requerirá mantener conversaciones con todos los implicados, incluidos los sindicatos.