El FMI rebaja al 0,9% la previsión de crecimiento en Alemania para este año

El impacto de la desaceleración en la mayor economía de la zona euro será mucho más notable de lo esperado. El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha revisado las previsiones de crecimiento de Alemania del 1,9% a sólo el 0,9% para este año, según publicó ayer el Financial Times sin citar fuentes. De confirmarse, se tratará del pronóstico más pesimista con el que se tendrá que enfrentar el país este año. El organismo también revisará el crecimiento de la zona euro, que será de un 1,25% en lugar del 1,9% estimado inicialmente.

Las incertidumbres sobre la debilitada economía alemana se acentúan. El FMI ya publicó el mes pasado una revisión oficial de crecimiento para este año y, sólo tres semanas después, ha vuelto a rebajarla hasta sólo el 0,9%. Se trata de una prueba más de que la desaceleración golpea más fuerte de lo pensado a Alemania, muy expuesta a la evolución de la economía internacional por la importacia que tienen las exportaciones en su economía.

Las presiones sobre el Gobierno de Gerhard Schröder aumentan para que siga los pasos del FMI en las próximas semanas. Berlín ha pronosticado un crecimiento del producto interior bruto del 2% para este año, aunque el canciller reconoció en agosto pasado que quizás se rebajaría al 1,5% debido a la mala coyuntura internacional.

El declive de la mayor economía europea arrastrará, sin duda, al resto de los 12 países de la zona euro, a juicio del FMI, que también rebaja sus previsiones de crecimiento del 1,9% al 1,25% en un borrador sobre las perspectivas económicas mundiales que aún no ha sido publicado oficialmente y que el Financial Times asegura haber leído.

Las pistas sobre el comportamiento futuro de Alemania son contradictorias. El crecimiento en el segundo trimestre fue nulo y la variación anual se redujo hasta el 0,6%, frente al 1,4% alcanzado en el primer trimestre. Pero el último barómetro de confianza empresarial, clave para intuir la evolución de la economía a largo plazo, mejoró por primera vez en meses. Peores noticias arrojó otra encuesta sobre las compras de productos por parte de los empresarios, que mostró una contracción del sector servicios.

Reducción del paro

Otro dato positivo vino de la mano del mercado laboral. El desempleo bajó en 2.000 personas el mes pasado, la primera reducción desde diciembre y situaba la tasa de paro en el 9,3%. Los economistas advirtieron, sin embargo, de que esa alentadora reducción sería sólo una excepción, porque el paro cayó en 7.000 personas en el Este, pero subió en 2.000 personas en el Oeste, la zona con una industria más desarrollada y de mayor crecimiento económico.

En un intento por frenar el enfriamiento de las economías europeas, el Banco Central Europeo (BCE) bajó la semana pasada los tipos de interés al 4,25% animado por la moderación de los precios. Una reducción demasiado tímida para los analistas, que aconsejaban al organismo con sede en Francfort mayor determinación. Mientras, la economía alemana se estancó en el segundo trimestre, pero también crecieron mucho menos Italia y Bélgica. El BCE ha bajado los tipos en dos ocasiones desde enero, mientras la Reserva Federal (banco central estadounidense) los ha recortado siete veces, del 6,5% al 3,5%.