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La UE evita hablar de derechos humanos en su cumbre con China

La Unión Europea (UE) y China acordaron ayer reforzar el diálogo político ampliándolo al capítulo del control de armamento, el desarme y la no proliferación. Los Quince reiteraron el apoyo sin fisuras al ingreso chino en la Organización Mundial de Comercio (OMC) y desean que quede refrendado en la cumbre ministerial de Qatar el próximo noviembre.

El primer ministro chino, Zhu Rongji, puede sentirse muy contento al término de la cumbre chino-europea, la cuarta desde 1999, toda vez que el comunicado final aborda la situación de los derechos humanos en su país de modo muy suave. No hay ni un solo término que exprese la preocupación de los europeos ni mención alguna al incremento de la pena de muerte. Tal vez ése sea el motivo por el que por vez primera ambas partes acordaron firmar una declaración de prensa común y celebrar también una conferencia de prensa conjunta.

'Ningún país es perfecto y tampoco lo es China', declaró Zhu en rueda de prensa al ser preguntado por la cuestión. Dijo que China está haciendo grandes progresos al respecto y explicó que la Asamblea Popular ya ha ratificado el Convenio de Naciones Unidas sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales y su Gobierno quiere firmar también el de Derechos Humanos.

La situación en Tíbet

Guy Verhofstad, primer ministro belga y presidente en ejercicio de la UE, no ocultó en público la preocupación sobre el escaso respeto de las libertades en China y la situación en Tíbet, y evocó el último informe de Amnistía Internacional en el que se hace referencia a la persecución de miembros de la secta religiosa Falun Gong. Las dos partes reafirmaron que continuarán el diálogo sobre los derechos humanos en términos de mutuo respeto e igualdad. Zhu, que afirmó que no continuará en el cargo cuando expire su mandato en verano de 2002 'por ser demasiado mayor', llegó a Bruselas acompañado de varios ministros y una nutrida delegación de más de un centenar de funcionarios.

Europeos y chinos acordaron en la capital comunitaria intensificar el diálogo político mediante más reuniones ministeriales y mayores consultas y anunciaron que en la agenda incluirán a partir de ahora el capítulo referente al control de armamento, el desarme y la no proliferación.

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En el campo comercial, la UE se congratula por que China se halle en la recta final para su ingreso en la OMC. 'Esperamos que en la reunión de Qatar el próximo noviembre quede oficializado el ingreso', dijo Verhofstadt. Los Quince confían en que la incorporación de Pekín a la organización multilateral permita enderezar su fuerte déficit comercial con China, que el año pasado se cifró en 40.000 millones de euros, el más elevado de la Unión con cualquier otro país por encima de Japón. La UE y China acordaron también ayer intensificar la cooperación para combatir la inmigración ilegal.

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