La firma bursátil llegó a pagar intereses del 108%
Los responsables de Gescartera persuadieron a algunos clientes para que depositaran, de forma provisional, grandes sumas de dinero a finales del año pasado con el objetivo de maquillar las cuentas anuales de la agencia de valores intervenida. A cambio, según publicaba ayer el diario Cinco Días, Gescartera ofrecía, por una inversión a 15 días, intereses del 3,85% que, en un año, suponen un tipo del 108%.
La táctica empleada por Antonio Camacho, propietario de Gescartera, perseguía engordar, a última hora, las cuentas de la agencia de valores para evitar que se destapara el agujero. Para persuadir a estos clientes, la firma ofrecía rentabilidades desorbitadas. El 28 de diciembre pasado se efectuó, por ejemplo, un depósito de 64 millones. Apenas 15 días después, el inversor retiró esta suma más otros 2.464.000 pesetas.
Pero este tipo de operaciones no hizo más que acrecentar el agujero en la agencia de valores. En el caso anterior, se perdieron casi 2,5 millones en dos semanas. Una cantidad que Camacho reponía de otra parte. De esta forma, el agujero llegó a los 18.000 millones.
Ésta táctica se suma a la lista de prácticas irregulares llevadas a cabo por Gescartera. Además de pagar rentabilidades inauditas para el sector financiero, la firma ofrecía depósitos estructurados, algo que sólo un banco puede proporcionar. La firma también hacía operaciones bursátiles intradía y lanzaba dos órdenes sobre el mismo valor (una de compra y otra de venta).
