Fallecen dos operarios en las obras de construcción de la autopista Eibar-Vitoria
Los operarios L.V.P., de 43 años y vecino de Rentería, y A.R.L., de 40 años y domiciliado en Ordizia, fallecieron ayer por la tarde en la localidad guipuzcoana de Bergara al caer por un tubo de entre 15 y 20 metros de longitud cuando se encontraban trabajando en las obras de construcción de la autopista Eibar-Vitoria (A-1).
El accidente laboral tuvo lugar cuando uno de los trabajadores descendía por el tubo subterráneo, dotado de unas escalerillas, y, por causas aún sin determinar, se cayó. Su compañero, al parecer, intentó socorrerle, pero corrió la misma mala suerte y también se precipitó al subsuelo, según informaron fuentes del Departamento de Interior del Gobierno vasco.
Las muertes de estos dos operarios elevan ya a seis el número de trabajadores fallecidos durante el mes de agosto en accidente laboral en Euskadi.El trágico siniestro laboral se produjo minutos antes de las cinco de la tarde, cuando uno de los trabajadores muerto descendía por el tubo subterráneo, de entre 15 y 20 metros de longitud y cuya boca se encuentra más o menos al ras del suelo. Por causas aún sin precisar, el operario cayó hasta el fondo del conducto, utilizado en las obras de la autopista Eibar-Vitoria.
A continuación, el otro operario fallecido se introdujo también en el tubo, al parecer con la intención de socorrer a su compañero, pero también se precipitó hasta el subsuelo.
Aunque todavía se desconocen las causas del doble fallecimiento, no se descarta que pudieran deberse a sendos desvanecimientos por falta de oxígeno o emanaciones de gases.
Los bomberos rescataron a los dos trabajadores. Uno de ellos ya estaba muerto, mientras que el otro se encontraba aún con vida, pero muy grave. Sin embargo, poco después, también falleció, sin que los sanitarios de urgencia desplazados hasta el lugar pudieran hacer algo por salvar su vida, según explicaron desde Interior.
El tramo en que ha tenido lugar el mortal accidente es concretamente el comprendido entre los municipios de Eibar y Bergara. El coste de las obras ascenderá a 29.000 millones de pesetas. Está previsto que los trabajos concluyan a finales del año que viene o en enero de 2003.
Los accidentes laborales se cobran cada año la vida de decenas de trabajadores. A lo largo del mes de agosto son ya seis los operarios que han fallecido en Euskadi mientras trabajaban.
