Un novillo mata a un joven de 16 años en Aielo

Miguel Biosca, un joven de 16 años vecino de Ontinyent, murió la noche del jueves en los festejos de vaquillas que se celebraban en un recinto cerrado en las calles de Aielo de Malferit (La Vall d'Albaida). El adolescente se encontraba en el interior del recinto por el que discurría un novillo de aproximadamente 450 kilogramos de peso. El muchacho se acercó por detrás a la res y recibió una fuerte coz en el tórax. Como confirmó el médico forense, tras realizar la autopsia en el cementerio de Ontinyent, el golpe le causó a la víctima un traumatismo cerrado torácico y la rotura de la aorta. 'Tras el golpe el joven intentó escapar hacia la barrera pero cayó desplomado antes de llegar', explicaba un vecino de Ontinyent que vio como ocurría el incidente.

Al lugar de los hechos acudieron el médico, el cirujano y la ATS que asisten en estos festejos, hasta que efectivos de la Cruz Roja recogieron al joven, todavía con vida, para trasladarlo al hospital de Ontinyent. Según el médico forense, el cuerpo llegó ya sin vida a las dependencias hospitalarias. El novillo que causó la muerte de Miguel Biosca pertenecía a la ganadería Benavent de Quatretonda, pesaba aproximadamente 450 kilogramos y era el sexto que salía en la tarde del jueves. Cuando ocurrió el accidente los ganaderos ya habían sacado al recinto al manso, el animal que incita a las reses a volver al corral y esperaban terminar la jornada de novillos en unos minutos.

El Ayuntamiento de Aielo de Malferit decretó ayer, en un pleno extraordinario, día de luto oficial y suspendió todos los actos festivos previstos a lo largo del día. En esta población, que combina las fiestas de Moros y Cristianos con los festejos de vaquillas se han cancelado todos los actos de bous al carrer que se habían previsto hasta el próximo 8 de agosto. Según la normativa que regula los festejos taurinos tradicionales, aprobada en 1998, no se permite la participación a los menores de 16 años. El fallecido iba a cumplir 17 años en septiembre.

El alcalde de Aielo, Francesc Martí, aseguró que la organización de las fiestas disponía de póliza de seguros de accidentes y de responsabilidad civil para la cobertura de los siniestros. El alcalde insistió en que se ha cumplido la normativa aprobada en el año 1998.