La explosión de una mina en Macedonia mata a dos observadores europeos
Fallece también un intérprete macedonio
Los tres fallecidos viajaban a bordo de un todoterreno por una carretera montañosa. El estallido de la bomba lanzó al fondo de un barranco de varias decenas de metros el vehículo, que quedó volcado en el lecho de un torrente. Los primeros resultados de la investigación abierta apuntan a que se trató de 'un accidente', y no de un ataque premeditado contra los observadores ni de una ruptura del débil alto el fuego que mantienen las fuerzas de seguridad macedonias y el ELN. Oficialmente, no se difundió ninguna información sobre qué organización colocó la mina o desde cuándo podía estar instalada.
El cuartel general de los observadores europeos perdió contacto con las víctimas hacia las cuatro de la tarde del jueves, y a partir de ese momento no se recibió respuesta alguna a las numerosas llamadas realizadas a través de los teléfonos vía satélite. Fuerzas de la Kfor y agentes de seguridad del Gobierno macedonio, junto con líderes albaneses, participaron en la operación de búsqueda.
Los dos observadores muertos estaban integrados en la Misión de Observadores de la UE (EUMM en sus siglas en inglés), en la que participan todos los países de la Unión junto con otros procedentes de Noruega y Eslovaquia. La misión está compuesta por 110 personas, tanto militares como diplomáticos, que actúan en Croacia, Serbia, Bosnia, Kosovo, Montenegro, Albania y Macedonia. Su labor es fundamental para que la UE disponga de una información veraz y objetiva sobre lo que ocurre en las zonas en crisis, con especial atención a las tensiones interétnicas y al control de las zonas fronterizas.
En el caso de los fallecidos, su principal objetivo era comprobar el respeto de los acuerdos de alto el fuego en Macedonia, donde están desplegados 24 observadores en las localidades de Tetovo, Kumanovo y Struga.
Un alto precio
El Alto Representante para la Política Exterior de la UE, el español Javier Solana, señaló ayer en un comunicado que los fallecidos ayer 'han pagado el precio más alto' por desarrollar una misión 'esencial con un coraje ejemplar a favor de la paz y la estabilidad en la región'. También el comisario de Asuntos Exteriores, Chris Patten, destacó 'la bravura y la profesionalidad' con la que los observadores de la UE desarrollan su trabajo a favor de la paz en los Balcanes.
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