Los republicanos piden la dimisión de Condit por el 'caso de la becaria'

Tren Lott, líder de la minoría republicana en el Senado de EE UU, pidió ayer la dimisión del congresista demócrata por California Gay Condit, implicado en el caso de Chandra Levy, la becaria desaparecida en Washington hace dos meses y medio.

Condit, según informaciones periodísticas que nadie ha desmentido, confesó a la policía en su tercer interrogatorio que, en los meses anteriores a su desaparición, sostuvo una relación sentimental y sexual con la becaria.

'El adulterio es siempre inaceptable, pero más si uno es un representante elegido popularmente que se lía con una joven becaria', declaró Lott, que como la mayoría de los legisladores republicanos votó a favor del cese de Bill Clinton por el caso Lewinsky. Lott añadió: 'Aunque alguna gente de la prensa se crea que todos los miembros del Congreso tenemos este tipo de aventuras, eso no es verdad'.

Dos días antes, Bob Barr, congresista republicano por Georgia, ya había pedido la dimisión de Condit. El demócrata californiano, según Barr, 'es una vergüenza para el Congreso'.

La Policía de Washington seguía ayer insatisfecha con la prueba privada de detección de mentiras a la que se sometió Condit el viernes. Según su abogado, la máquina no registró engaño cuando el congresista dijo que no sabía nada de la desaparición de Levy, el 30 de abril. Pero Terrance Gainer, jefe adjunto de la Policía, le pidió ayer a Condit que acepte ser interrogado por sus agentes con un detector de mentiras colocado a su cuerpo. 'Queremos hacer nuestra propia prueba', dijo Gainer.

Nadie ha encontrado el menor vínculo entre la desaparición de la becaria y el político californiano, pero el comportamiento de este último ha disparado muchas sospechas.

Romance secreto

En la edición que hoy coloca en los kioskos, el semanario Newsweek informa de que, días antes de la desaparición, Condit y Levy acordaron continuar su romance secreto aunque la joven había terminado sus prácticas en la Oficina Federal de Prisiones y se disponía a regresar temporalmente a California.

Según el semanario, 'la policía cree que es poco probable que Condit tuviera algo que ver con su desaparición, pero todavía sigue sin estar convencida de que les ha contado todo'.

Las revelaciones de estas semanas ofrecen la imagen de un maduro y atractivo político demócrata que llevaba una doble vida. En su distrito californiano de Modesto aparecía como un esposo y padre ejemplar, pero en Washington, donde vivía en un apartamento del barrio bohemio de Adams Morgan sin su esposa y sin sus dos hijos, era un mujeriego.

Además de su aventura con la becaria desaparecida, la prensa y la Policía le han descubierto otras, incluida una con una azafata.