Las 3.200 viviendas que rodearán el casino de Aranjuez imitarán el urbanismo del XVIII

El Gobierno regional ha dado luz verde a la recalificación urbanística del área donde se levantará el futuro casino de Aranjuez, promovido por la Comunidad para competir con el que Castilla-La Mancha quería ubicar en Toledo. Pero la recalificación no llenará sólo de jugadores Aranjuez, sino también de casas. Urbanismo ha aprobado una modificación del plan general que permite edificar, además del casino, 3.200 viviendas anexas. Para que Aranjuez pueda seguir optando a ser Patrimonio de la Humanidad, las casas deberán imitar el urbanismo del siglo XVIII.

El Gobierno presidido por Alberto Ruiz-Gallardón anunció en diciembre de 2000 que la Comunidad concedería la segunda licencia de juego en la región -actualmente sólo existe un casino, en Torrelodones- porque el Ejecutivo de Castilla-La Mancha planeaba levantar un local de juego en sus límites con Madrid. Ante la posibilidad de que los jugadores -y los impuestos que genera esta actividad- se desplazasen a la comunidad vecina, Ruiz-Gallardón decidió apostar por un casino en Aranjuez, municipio limítrofe con la provincia de Toledo.

Compró en secreto la finca de La Montaña (270 hectáreas), por unos 3.000 millones de pesetas, e inició sus planes para recalificarla y poder levantar el casino, hoteles, un parque tecnológico, un centro de convenciones, varios complejos turísticos y 3.200 viviendas con vistas al centro lúdico.

Pero la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes se ha dado cuenta de que la construcción de estas 3.200 nuevas casas puede perjudicar a la candidatura de Aranjuez como futuro Paisaje Cultural de la Humanidad: una modificación urbanística desafortunada puede reducir las posibilidades de la ciudad a este galardón que concede la Unesco. Por ello, ha ordenado que el planeamiento de la zona se ajuste a 'una ordenación ilustrada que evite cualquier impacto negativo sobre el paisaje de La Montaña y su entorno'.

Grandes avenidas

La Comunidad anuncia así que la zona se urbanizará siguiendo las normas arquitectónicas y urbanísticas del siglo XVIII: grandes avenidas con manzanas rectangulares en torno a un gran edificio emblemático. De hecho, el propio casco urbano de Aranjuez sigue perfectamente este esquema, ya que se desarrolla en torno al palacio real.

Durante casi dos meses, la modificación concreta del plan general estuvo en información pública. Sólo se presentaron dos alegaciones en tiempo y forma (una del grupo municipal del PSOE y otra de una empresa que vendía sus servicios de consultoría). Los socialistas argumentaron que el cambio urbanístico propuesto por Urbanismo no requería una simple modificación concreta del plan general de la localidad, sino su revisión completa.

Una revisión de las normas urbanísticas obligaría a abrir un largo periodo de consultas e informes, lo que retrasaría el inicio de las obras, previstas para este mismo año. La consejería, tras estudiar la queja, la rechazó.

Ecologistas en Acción también presentó, aunque fuera de plazo, una alegación en la que recordaba que el nuevo desarrollo rompería 'la norma de protección' del norte de Aranjuez, ya que esta zona está reservada para usos agropecuarios, lo que ha permitido la 'supervivencia de sotos, huertos y zonas arboladas'. El casino y las infraestructuras que lo rodearán, según los proteccionistas, afectará 'muy directamente' a los ecosistemas. Urbanismo estimó parcialmente esta alegación -a pesar de presentarse fuera de plazo- y aceptó que las obras sean sometidas al procedimiento de evaluación ambiental 'que fuera necesario'.

La Dirección General de Patrimonio emitió, por su parte, un informe en el que destacaba que la modificación del plan 'se sitúa fuera del límite del conjunto histórico de Aranjuez', pero que sería necesario proteger determinados elementos dentro de la finca de La Montaña (Casa de la Mira del Rey, edificios anejos, la aceña). De todas formas, según los técnicos de la Viceconsejería de Patrimonio, la finca es 'zona arqueológica incoada bien de interés cultural' desde 1989 y contiene áreas de 'alto potencial arqueológico'. Por ello, proponen que se lleve a cabo una 'actuación arqueológica, previa a la concesión' de las obras.

Tras el verano, la Comunidad hará público el concurso de adjudicación del casino. Los técnicos de Hacienda valorarán no sólo el proyecto del centro de juego, sino también el de las inversiones que lo rodearán.

Por el momento, ya han manifestado su interés por el proyecto el grupo español Cirsa, el casino de Torrelodones y dos compañías estadounidenses. Pero, hasta que no se haga público el pliego de condiciones, ninguna de estas empresas mostrarán sus cartas.