_
_
_
_
_

Los planeamientos urbanísticos de los municipios litorales prevén duplicar la superficie construida

El suelo urbanizable previsto por los planes generales augura un modelo residencial extensivo

Los planeamientos urbanísticos de los municipios litorales prevén duplicar la superficie construida

El suelo urbanizable previsto por los planes generales augura un modelo residencial extensivo

Los cascos urbanos de los 60 municipios costeros de la Comunidad Valenciana ocupan ahora 35.257 hectáreas y dan cobijo a dos millones de habitantes. Y pese al criterio mayoritario de que el litoral mediterráneo ya está suficientemente castigado, los planeamientos urbanísticos de estos municipios han reservado otras 30.767 hectáreas como suelo urbanizable. Es decir, o bien estas localidades han reservado suelo como para duplicar su población o están apostando por un modelo urbano extensivo de segundas residencias y turismo de temporada. La ley de Ordenación del Territorio del PP no pone freno a este acoso futuro.

La tercera parte de los municipios de la costa han hecho reservas de suelo de más de 500 hectáreas para próximas construcciones. Tal acopio de suelo hace que el 48% del suelo residencial (urbano y urbanizable) de toda la comunidad se sitúe en la franja costera pese a que estos municipios sólo suponen el 14% del territorio total.

Según las cifras de la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes (COPUT), incluidas en la cartografía temática El Planeamiento Urbanístico en la Comunidad Valenciana, el caso más exagerado es el de Peñíscola, que con sólo un 4% de su territorio como suelo urbano ha clasificado como urbanizable otro 54%, aunque la creación del parque natural de la Serra d'Irta obligará a desclasificar 30 de los 40 kilómetros cuadrados consagrados a las urbanizaciones. No es el único caso, otros 14 municipios han planeado crecer más del doble.

Mientras en gran parte del litoral de la provincia de Valencia el planeamiento es más acorde con el del resto de la Comunidad, en el sur de esta provincia y en Alicante se apuesta por crecimientos a base de urbanismo extensivo. Y Castellón, con modelos poco definidos, tiene una reserva desmesurada, pues prevé triplicar su superficie urbana.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_