PP y PSOE anuncian una ofensiva común en la Unión Europea para cercar a ETA

Javier Arenas y Jesús Caldera creen 'fundamental' el papel que pueden desempeñar las instituciones internacionales, y particularmente la UE, en el estrechamiento del cerco a la banda terrorista. Fue una de las claves que inspiró el Pacto Antiterrorista suscrito en diciembre de 2001 y una de las prioridades que tanto José María Aznar como José Luis Rodríguez Zapatero fijaron en la acción común de ambos partidos frente a ETA. Caldera precisó que la toma progresiva de medidas institucionales hacia un espacio judicial común europeo es 'el mayor daño que se le puede hacer a la banda en este momento' y 'más aún con el acuerdo redoblado de las dos corrientes más representativas de Europa, como la socialista y la popular'.

El PP y PSOE se dirigirán a la presidencia belga de la Unión Europea, una vez constituida a primeros de julio, y al comisario europeo de Justicia, el portugués Antonio Vitorino, para estimularles a que avancen por el 'camino recién iniciado del espacio judicial europeo'. Para preparar el terreno, tanto Arenas como Caldera felicitaron la reciente decisión del Senado belga de condenar a ETA. La felicitación no era baladí porque Bélgica ha sido uno de los países europeos más reacios a actuar contra la banda al pesar en su opinión pública la imagen de una ETA antifranquista, hace años inexistente.

'En Bélgica empieza a producirse un giro en la mentalidad para tratar al terrorismo con la importancia y la gravedad que le corresponde. Esos cambios de mentalidad tendrán que traducirse en cambios legislativos', señalan fuentes del PP y PSOE.

Arenas y Caldera precisaron estos cambios legislativos que estudiarán las instituciones europeas para facilitar la lucha antiterrorista: La tipificación común del delito de terrorismo en Europa; la creación de la figura de orden de caza y captura de los terroristas y la superación de las fronteras para entregar a los terroristas y juzgarlos en los países en que han cometido los delitos.

La Comisión de Seguimiento del Pacto Antiterrorista también aprobó ayer el borrador de los estatutos de una fundación de apoyo a las víctimas del terrorismo. Tendrá una función asistencial de las víctimas del terrorismo -con apoyo económico mixto, público y privado-, pero otorgará mucha importancia al papel movilizador en torno a las víctimas -con todo tipo de actividades divulgativas y culturales- para 'dignificar su papel', según señalaron Arenas y Caldera. 'Habrá donativos de empresas muy importantes, y queremos que sus nombres salgan a la luz. Nos parece tan importante o más que el apoyo económico a las víctimas, el reconocimiento público del mismo para acabar con tantos años de silencio', señaló el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, miembro de la Comisión de Seguimiento del Pacto.

Los firmantes del Pacto se dirigirán a las principales empresas, en particular a las que cotizan en el Ibex, índice que recoge los 35 valores más importantes de la Bolsa española, para que aporten fondos para esta macro fundación. En este índice figuran los grandes bancos, las eléctricas, las constructoras y grandes empresas de distribución.

La creación de esta macro fundación no supondrá la desaparición de las actuales asociaciones de víctimas del terrorismno. La representación de la AVT lo confirmó tras reunirse con la Comisión de Seguimiento del Pacto Antiterrorista y no pudo eludir un reproche histórico. 'Algunos políticos deberían sonrojarse por la situación de las víctimas desde un punto de vista histórico'.