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Reportaje:

La vida bajo la 'burka'

Una muestra en Ca Revolta exhibe las penalidades de las mujeres afganas bajo el régimen talibán

'Verás como todo resulta distinto, compruébalo por ti mismo. Este traje anula la personalidad de las mujeres afganas: impide ver y ser vista'. Esta invitación, dirigida a los visitantes de la muestra fotográfica que expone en Valencia Ca Revolta sobre la tragedia que padecen las mujeres afganas no es nada inocente. Está al lado de tres burkas, una prenda que deben vestir las mujeres cada vez que salen de casa y refleja como ningún otro objeto la opresión que sufren. La exposición ofrece la oportunidad de experimentar por unos instantes la extremecedora experiencia de percibir la realidad a través de esta incómoda túnica que cubre todo el cuerpo y sólo deja una pequeña rejilla frente a los ojos para ver a duras penas.

Hasta el 31 de mayo, el local social de Ca Revolta (Santa Teresa 19, en Valencia) exhibe la muestra Mujeres en Afganistán, lo que hay detrás del velo, una selección fotográfica -entre las que incluye imágenes de Sebastiao Salgado- que arrojan luz sobre la difícil existencia de las mujeres bajo el régimen talibán, la milicia de islamistas rigoristas que en 1996 tomaron Kabul la capital del país, y controlan aproximadamente el 60% del territorio. Imágenes de mujeres cubiertas hasta los tobillos, de la miseria que atenaza la vida diaria de los habitantes del país, los edificios en ruinas que dejó la guerra y que siguen derruidos por la falta de medios, jalonan la exposición. Son fotografías que reflejan la dureza de la vida cotidiana en el país asiático, como la que muestra una clase clandestina, en la que se ha borrado la cara de la profesora de forma que no se la pueda identificar. Y es que al ejercer de maestra, pone en riesgo su vida al contravenir dos de los principales principios de los talibán: la prohibición del trabajo de las mujeres y el cierre de las escuelas femeninas. Las niñas sólo tienen derecho a una educación coránica hasta los nueve años.

Éstas son algunas de las medidas impuestas por estos islamistas radicales entre las que se encuentran otras como la prohibición de los baños públicos, las reuniones de más de cinco personas o el mandato kafkiano que impide tener pájaros enjaulados. Otras castigan a los culpables de adulterio con la lapidación u otorga a los familiares de las víctimas por asesinato la posibilidad de vengarse matando al agresor.

La exposición, en la que colaboran con aportación de fondos documentales la Asociación Cultural Gatosa y Médicos del Mundo y en la que también participa la Comisión de la Marcha de Mujeres 2000 y la Casa de la Dona, no se limita a las fotografías. Hasta finales de mes, en el salón social de Ca Revolta se exhibirán vídeos y se realizarán coloquios que transmitirán las penalidades de las mujeres afganas. El próximo sábado, a las 11.30 de la mañana, será el turno de Gloria Roig y Victoria Moreno, mujeres recién llegadas de los campamentos de refugiados afganos en Pakistán, que narrarán en el Colegio Mayor Rector Peset las experiencias que les transmitieron a través de su testimonio las víctimas de la opresión talibán.

Algunas de las reflexiones de las víctimas ya se encuentran recogidas en la exposición, como la de una mujer que se lamenta de la vida bajo el régimen talibán: 'Al menos durante los 18 años de guerra civil éramos libres'.

<i>Burkas</i> y fotografías de la muestra que se expone en Ca Revolta.
Burkas y fotografías de la muestra que se expone en Ca Revolta.JESÚS CÍSCAR
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