La Junta de Gobierno de la Politécnica rechaza la ley de universidades

'No entiendo por qué se hace una ley que no es una ley del siglo XXI', aseveró Justo Nieto, en un momento de la larga sesión de puertas abiertas, en la que durante más de dos horas todos los miembros de la Junta de Gobierno, representantes del personal de administración y de la delegación de alumnos, además del profesorado en general, diseccionaron milímetro a milímetro la propuesta de Ley Orgánica de Universidades (LOU) elaborada por el equipo del ministerio que dirige Pilar del Castillo.

Nieto cargó las tintas, especialmente, contra dos de los cambios. En primer lugar, contra el sistema de habilitación del profesorado, del que sentenció: 'La vuelta a un tribunal nacional de Madrid es algo que, para los que hemos pasado por ello, trae muy malos recuerdos'. Y, en segundo término, contra la creación de una agencia nacional de la calidad que, a su juicio, será el órgano que 'tendrá todo el peso del sistema de acreditación del profesorado' y, en general, de la planificación del sistema. También se puso del lado del personal de administración y el colectivo de estudiantes, cuya representación quedará excluida de los departamentos. Ambos colectivos verán reducida notablemente su participación en el nuevo Consejo de Gobierno [que hará las veces de Junta de Gobierno, pero tendrá menos prerrogativas en términos de planificación y gestión académica]. 'La representación de los alumnos pasará a ser prácticamente cero, incluso, puede haber listas cerradas donde no haya ningún alumno'. Esta fórmula fue calificada por el delegado de alumnos, Antonio Fernández, como un nuevo 'despotismo ilustrado', bajo el lema de 'todo para el alumno, pero sin alumnos'.

El profesor Vicente Caballer abrió la sesión con una gráfica exposición sobre los nuevos órganos de gobierno, que pretende imponer el ministerio, lo que unido a la cuestionada Ley valenciana de Consejos Sociales, a la que también se refirió Nieto en un sentido muy peyorativo, 'supone un cambio total a las estructuras organizativas de la universidad'. 'El resultado', precisó Nieto en coincidencia con la mayoría de las intervenciones del profesorado, 'es un control inadimisible y una pérdida de autonomía'.

El rector también tuvo palabras de suma dureza contra la ya famosa endogamia universitaria, de la que dijo, se ha hecho 'un uso demagógico'. 'Hablar hoy de endogamia universitaria es impropio, y sobre todo, hacerlo en un sentido peyorativo', señaló el rector, al ironizar sobre la movilidad que ofrece el actual momento en el que 'se está a dos horas de cualquier capital europea'.

Pero, donde más le duele a la comunidad universitaria de la Politécnica, es que 'el proyecto no dedica ni una sola línea a la innovación tecnológica'. 'Es un proyecto contra las politécnicas', añadió, al mencionar que él mismo, el presidente de la CRUE, Saturnino de la Plaza, de la Politécnica de Madrid y el de la de Cataluña, Jaume Pallés, están consensuando posiciones para tener un representante en la futura agencia nacional. La Politécnica se debatió ayer entre echar abajo la ley o seguir los pasos que dará durante los próximos días la Conferencia de Rectores Españoles (CRUE) que, de momento, ya ha logrado que la ministra cancele la reunión del pleno del Consejo de Universidades, el próximo día 30, donde pensaba cerrar el último borrador. La falta de respuesta a la homologación de los titulares de escuela y de facultad, la indefinición sobre el papel de los departamentos y los centros y el hecho de que se potencien los institutos de investigación por encima de los departamentos, fueron los grandes temas de debate, que recibieron el mayor número de intervenciones críticas. En opinión de Nieto, 'parece que se haya cogido un montón de temas y se han fundido de mala manera'.