Zarrías atribuye el fracaso de las transferencias a las 'ganas ciegas' del PP de echar al PSOE de la Junta

Aunque el consejero comenzó en un tono monocorde y conciliador a enumerar las secuencias de entrevistas entre una administración y otra para acordar costes y contenidos de las transferencias, en el último turno de palabra estalló en una tromba de acusaciones al PP. Zarrías atribuyó la 'cerrazón' del Gobierno central para, según él, bloquear el traspaso de competencias a que el PP está atrapado en una 'noria de desprecio a Andalucía' porque 'le ciega las ganas de acabar con nosotros '. Por primera vez en el Parlamento, el consejero expuso la teoría socialista de que los populares, una vez celebradas las elecciones vascas, van a concentrar todas sus energías en desalojar al PSOE del Ejecutivo de la Junta, que dirige desde 1982. 'La ofensiva del País Vasco es una merienda campestre con el Lepanto que va a organizar aquí: ¡Que vengan!, nos encontrarán con el pecho bien puesto', enfatizó.

Gaspar Zarrías simbolizó en la infructuosa negociación sobre las transferencias de las políticas activas de empleo y el Inem la frustración y 'decepción' de su Gobierno, el cual, afirmó, comprueba cómo una vez más 'el velo de Penélope se teje durante meses y, abruptamente, con un telefonazo o zapatazo de Madrid, se desteje'. 'No es que no haya financiación, es que lo que ustedes pretenden es seguir mangoneando el Inem', aseguró.

Frases gruesas al margen, el balance de un año de negociaciones entre los dos ejecutivos no ofrece nada en el haber. Ninguno de los asuntos acordados por José María Aznar y Manuel Chaves en su primera y única entrevista tras las elecciones de 2000 (censo, financiación, inversiones y traspasos) se ha desbloqueado. Para Zarrías la situación demuestra que hay una 'estrategia permanente' por parte del PP de asfixiar a Andalucía, mientras que para el portavoz popular, Antonio Sanz, el parón es por culpa de la Junta que está esperando 'a ver cómo se desarrolla la negociación sobre la financiación autonómica'.

Sanz aseguró que el Gobierno central está dispuesto a transferir de 'manera inmediata' hasta un total de 14 competencias, algunas de ellas de orden menor, y achacó la falta de acuerdo sobre las políticas de empleo a que la consejera de Economía, Magdalena Álvarez, 'boicoteó' la firma.

El dirigente conservador pasó por alto las contradicciones públicas entre el ministro de Trabajo y el secretario general de Empleo sobre este asunto. Sanz también reprochó al Gobierno andaluz el que no dé a conocer los convenios de colaboración firmados con Madrid (145 en cinco años): 'Ustedes ponen la mano bajo la mesa y hacen fuegos de artificio con la confrontación'.

También se escucharon críticas al Gobierno andaluz desde las filas de los dos grupos que solicitaron la comparecencia del consejero, pero por motivos radicalmente distintos a los del PP. 'El diálogo ha fracasado y es necesario una movilización sostenida', dijo el portavoz de IU, Antonio Romero.

Pedro Pacheco, del mixto, lamentó que después de 20 años de autonomía se llegue a la conclusión de que no funciona 'instalada en la rutina y la ineficacia: Zarrías ha dicho lo mismo que en 1996'.