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LA SITUACIÓN EN EL PAÍS VASCO

Zapatero advierte a Aznar de que no cuente con él para llevar la 'crispación' a Euskadi

El líder socialista pide a Ibarretxe un gesto de 'cariño' con las víctimas y los amenazados por ETA

Zapatero pidió ayer a Aznar que actúe con 'inteligencia' en el País Vasco y expresó su preocupación por la forma con la que el presidente del Gobierno y líder del Partido Popular ha encajado los resultados del 13 de mayo. Calificó de 'desacertado' que Aznar haya atribuido a la 'falta de madurez' de los ciudadanos vascos los resultados electorales: 'Hay quien piensa que se necesitaría un pueblo vasco más maduro y hay otros que pueden pensar que necesitamos un Gobierno más fresco', ironizó. Y ya sin bromas, remachó: 'No se me hubiera ocurrido decir eso el 12 de marzo , cuando el PP obtuvo mayoría absoluta'. Por ello, Zapatero pidió a Aznar que respete la voluntad de los vascos expresada en las urnas.

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En un mitin en Gáldar (Gran Canaria), el líder socialista criticó también que Aznar argumente 'que él no se va a rendir' tras las elecciones vascas. Para Zapatero, 'gobernar no es sólo tener firmeza; gobernar es, además, tener inteligencia, capacidad de anticipación de los acontecimientos, y no sólo capacidad de esperar y resistir'.

Equivalencias con 1993

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Esta estrategia de 'resistencia' y la comparación de la situación actual en Euskadi con la española en 1993 le parecen a Zapatero muy preocupantes. Recordó que el PP encajó aquella derrota promoviendo una 'etapa de crispación muy fuerte' que llevó a 'una situación política muy delicada', y subrayó que el PSOE no participará de esa vía.

A cambio, dijo que el PSE-PSOE apuesta por una 'oposición constructiva' en el País Vasco. En una entrevista que ayer publicaba La Vanguardia, Zapatero mantiene que 'el PP sabe que es imprescindible buscar la unidad de los demócratas y que hay que trabajar más en buscar un punto de encuentro que en magnificar los desencuentros'.Zapatero no quiso adelantar ayer en Gáldar qué votará el PSE en la sesión de investidura de Juan José Ibarretxe como lehendakari. 'No hay que ir con un prejuicio' a esa investidura, por lo que el PSE decidirá su voto después de escuchar el programa con el que Ibarretxe comparezca ante el Parlamento vasco.

Al anunciar que estará en la oposición, Zapatero insinuaba que, en principio, no votará a favor, pero dejaba abierta una puerta a la abstención. Una puerta que también abrió el secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros en una entrevista en El Correo. A la pregunta de si se abstendrá en la investidura, Redondo responde: 'Si Ibarretxe dice 'quiero recuperar la unidad democrática, aceptando las reglas del juego, y rechazando la violencia como instrumento para conseguir un objetivo político', no puedo decirle que no'. Redondo incluso no rechaza totalmente una hipotética participación en el Gobierno de Ibarretxe: 'Ni el PSE ni el PP deberían cerrar ninguna puerta a nada, sabiendo que la sociedad ha decidido que los nacionalistas tengan la posibilidad de gobernar'.

De momento, Zapatero pidió ayer a Ibarretxe que 'haga algún gesto de cariño' a las víctimas del terrorismo y a los amenazados por ETA. El líder socialista reclamó al vencedor el 13-M una muestra 'de compromiso sólido, de cercanía y visible, hacia todos los cargos públicos que hay en Euskadi y que pueden tener amenazada su libertad'. También le pidió que 'dé amparo, cariño y solidaridad, y demuestre que comparte el sufrimiento y la zozobra' de las personas que viven amenazadas por la banda terrorista. Para Zapatero es muy importante que el PNV demuestre que comparte 'el ánimo decidido de no tolerar que alguien pueda dejar la actividad pública en un país democrático' porque otras personas con ideas diferentes estén dispuestas a matarle.

El consejero de Interior en funciones del Gobierno vasco, Javier Balza, ofreció ayer una primera muestra a esta demanda de Zapatero. En una entrevista en Radio Euskadi, Balza dijo que la legislatura pasada fue 'difícil en lo político' para el PNV. Pero a renglón seguido admitió que lo 'realmente difícil son los entornos de las víctimas y de los que sufren la persecución de los violentos y los intolerantes'. Y eso, agregó, 'no lo podemos olvidar nunca', porque 'una cosa es que te insulten en la tertulia de turno, pero donde de verdad se sufre es cuando los mínimos básicos de esta vida no están garantizados'. Respecto a esas tertulias, Balza se permitió agradecerles su campaña en contra del PNV al concluir que han generado un efecto boomerang: 'No sé si serán conscientes de la campaña que han hecho a nuestro favor en estas elecciones', porque 'esos insultos, amenazas, barbaridades y mentiras han provocado una reacción en la ciudadanía, que no consiente que se insulte al conjunto de los vascos día a día'.

Una militante socialista besa la mano a Zapatero, ayer en Gran Canaria.
Una militante socialista besa la mano a Zapatero, ayer en Gran Canaria.EFE

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