Los profesores temen que la Generalitat ceda la formación de adultos extranjeros al voluntariado
La preocupación de los docentes ha llegado a la Generalitat de la mano de la Mesa de la Educación de Adultos de Cataluña, en la que hay representantes de los sindicatos CC OO y USTEC, y de los profesores.
Los profesores denuncian que Bienestar Social pretende ceder la alfabetización de inmigrantes a organizaciones de voluntariado o entidades sin ánimo de lucro, con lo que no se garantiza que la enseñanza la impartan profesionales cualificados. 'Parece que todo el mundo se ve capaz de alfabetizar a los inmigrantes, y no debería ser así', señalan fuentes sindicales.
La directora de la escuela de adultos Barri Gòtic, Crescen García, reprocha a la Generalitat que, pese a organizar cursos de formación para profesores, no exija mayor especialización para impartir clases a los alumnos extranjeros. 'Debería tener en cuenta que la alfabetización de inmigrantes que acaban de llegar tiene unas características específicas por el desconocimiento oral que suelen tener estas personas de la lengua de aprendizaje', señala García. La escuela de adultos Barri Gòtic, con una larga experiencia en formación de inmigrantes, se ha convertido en una suerte de 'modelo que seguir' por las escuelas donde el número de extranjeros aumenta año tras año.
La directora destaca que si el centro se halla en una situación privilegiada no es precisamente por el apoyo recibido de la Administración, sino sobre todo por el empeño y la motivación del claustro de profesores. 'Si tenemos personal cualificado es porque nos hemos preocupado de apuntarnos a cursos de formación específicos y porque hemos buscado el material adecuado a las nuevas necesidades educativas de la escuela', señala la directora de la escuela Barri Gòtic.
Flexibilizar la programación, organizar cursos 'a la carta' y potenciar la atención individualizada son otras medidas que ha adoptado la escuela de adultos Barri Gòtic, que se ha beneficiado, además, de un refuerzo de profesores por parte de Bienestar Social.
No ha ocurrido así con otras escuelas de formación de adultos del área metropolitana de Barcelona y de la comarca de Osona, que se quejan de que llevan tiempo pidiendo un aumento de la plantilla para afrontar el sobreesfuerzo que exige el aumento de alumnos inmigrantes. 'El problema es que la Generalitat no invierte dinero en la formación de adultos', señalan fuentes sindicales.
El Departamento de Bienestar Social niega con rotundidad las críticas de los profesores y los sindicatos. 'Llevamos años trabajando para que las escuelas de adultos sigan siendo un punto de referencia para la nueva inmigración', señala la directora general de Formación de Adultos, Ángela Miquel. Según afirma, la Generalitat no ha ahorrado esfuerzos en dotar a los centros de los recursos humanos y materiales necesarios.
De los 9.304 inmigrantes matriculados en las escuelas de adultos el año pasado -sobre un total de 143.000 alumnos-, 3.781 eran de origen marroquí, y 998 eran chinos. El tercer colectivo más numeroso fue el gambiano, con 345 alumnos.
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