El movimiento antiglobalización se cita en Barcelona
El Banco Mundial quiere seducir a las ONG para que participen en su conferencia de junioLa organización ha ofrecido a los grupos críticos que hablen para desactivar las protestas
El difuso movimiento antiglobalización, que irrumpió a finales de 1999 en Seattle durante la cumbre de la Organización Mundial del Comercio (OMC), ha incluido por primera vez a España en su particular calendario de movilizaciones. Decenas de organizaciones sociales llevan meses preparando una respuesta a las jornadas que el Banco Mundial celebrará en Barcelona del 25 al 27 de junio. Han proclamado a los cuatro vientos que sus actuaciones van a ser pacíficas, pero la policía está en alerta roja. Y el Banco Mundial ya se ha dirigido a las organizaciones no gubernamentales (ONG) para que se impliquen en la cumbre y rebajen las protestas.
La reunión que el Banco Mundial celebrará en Barcelona es de segundo nivel dentro del circuito de conferencias de los organismos multilaterales, porque no se tomará ninguna decisión política. Se trata más bien de un foro académico que debatirá sobre nuevas perspectivas para el desarrollo y que se celebrará apenas un mes antes del encuentro en Génova del G-8, una cita mucho más interesante para los activistas antiglobalización. Pese a ello, los miembros de la Campaña contra el Banco Mundial, Barcelona 2001, que agrupa a decenas de organizaciones políticas y sociales de toda España contrarias al evento, se han propuesto implicar a miles de ciudadanos en sus jornadas alternativas.
Las sesiones oficiales se celebrarán en el Palacio de Congresos de Cataluña y el programa, que aún no se ha cerrado del todo, incluye, la participación del vicepresidente del Gobierno español Rodrigo Rato; el presidente del Banco Mundial, James D. Wolfensohn; el ex presidente mexicano Ernesto Zedillo y el premio Nobel de Economía James J. Heckman, de la Universidad de Chicago. El Banco Mundial trabaja ahora a fondo para tratar de incluir en el programa alguna voz crítica que pueda desactivar en parte las anunciadas protestas, al igual que ha hecho en anteriores conferencias.
Susana Esteban, responsable del Banco Mundial para el Sur de Europa, se entrevistó el pasado miércoles en Barcelona con la junta de la Federación Catalana de ONG para el Desarrollo. Fuentes conocedoras del encuentro explican que Esteban ofreció a las ONG casi un cheque en blanco: si quieren, pueden organizar algún taller, dictar conferencias e incluso dirigirse al plenario. Esteban llegó a sugerir que interviniera Susan George, autora de El informe Lugano, un libro que sitúa el capitalismo como antagonista del bienestar y que responsabiliza precisamente a instituciones como el Banco Mundial de la pobreza que sufren millones de seres humanos.
Las ONG tomaron nota de la propuesta y la junta directiva de la federación la discutirá esta semana. Algunas ONG consideran que su presencia podría dar a su mensaje un impacto muy superior al que obtendrían sólo con movilizaciones, pero han aplazado la respuesta hasta la semana que viene. La presencia de George en los actos oficiales de la conferencia ha sido descartada tajantemente por la organización española de ATTAC, la organización internacional de la que forma parte George, que promueve la implantación de un impuesto a las transacciones financieras especulativas conocido como tasa Tobin.
'No queremos dialogar con el Banco Mundial, estamos en confrontación drástica, aunque pacífica, con esta institución', subraya Carlos Frade, de la junta de ATTAC en Cataluña. Frade confirmó que George estará en Barcelona, pero en las jornadas alternativas, a las que también acudirán otros líderes críticos con la globalización como José Bové.
El manifiesto que ya han consensuado decenas de entidades sociales va en la misma línea de enfrentamiento. El texto considera que el Banco Mundial beneficia a 'especuladores y empresas transnacionales' y lo declara 'institución no grata'. El documento concluye con un llamamiento a 'movilizarse de forma pacífica, pero contundente, contra la presencia del Banco Mundial '.
La inclusión del adjetivo pacífica por parte del movimiento antiglobalización no es gratuita. La coordinadora ha preparado un programa festivo, que incluye verbenas, fiestas y una manifestación con pasacalles, precisamente para desmarcarse de las acciones violentas que se han producido en otras movilizaciones antiglobalización en diversas ciudades del mundo. No obstante, la plataforma no ha logrado reunir a todas las organizaciones que se oponen a la celebración de la conferencia del Banco Mundial.
Los más radicales han creado otro grupo, más reducido pero muy activo, que mantiene relaciones cordiales con la plataforma alternativa oficial. El nombre que han escogido, no obstante, es toda una declaración de intenciones y augura algún que otro altercado en las calles de Barcelona, por las que patrullarán muchos más policías de los habituales. Eso sin contar los agentes antidisturbios llegados de varias ciudades para la ocasión y que durante los días que dure la conferencia tomarán la avenida Diagonal, donde está el palacio de congresos. La plataforma que agrupa a los más radicales se llama Barcelona tiembla y edita la revista Está todo fatal.
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