Sanidad recomienda limitar el uso de móviles entre los niños

Una investigación de científicos independientes promovida por el Ministerio de Sanidad y Consumo ha llegado a la conclusión de que los aparatos de telefonía móvil, tanto receptores como antenas, no suponen un peligro para la salud. Pese a ello, el trabajo recomienda 'promover un uso racional de los teléfonos móviles', sobre todo en 'niños, adolescentes o portadores de implantes activos'. Este consejo se debe a 'elevar el principio de precaución al máximo', explicó el epidemiólogo Manolis Kogevinas, del Instituto Municipal de Investigación Médica de Barcelona, quien insistió en que 'no quiere decir que se haya demostrado ningún efecto'.

Francisco Vargas, coordinador del estudio y subdirector general de Sanidad Ambiental y Salud Laboral, dio otro punto de vista a esta recomendación: restringir el uso de móviles en adolescentes o enfermos 'es más bien una norma de bienestar social o de uso cortés', dijo. El mismo principio justifica otra de las conclusiones del estudio, la de no instalar antenas o líneas de alta tensión 'en las inmediaciones de espacios sensibles, como centros educativos, de salud o parques'.

En el informe, cuyas conclusiones asume el Ministerio de Sanidad, en palabras de Dolores Flores, directora general de Salud Pública y Consumo, se insta a los fabricantes a que etiqueten 'de forma clara y sencilla' en los terminales su potencia de emisión.