_
_
_
_

Un neurólogo de EE UU asegura haber hallado la sede cerebral del yo

Javier Sampedro

El yo está en una pequeña región del córtex cerebral, más o menos encima de la ceja derecha. Al menos eso es lo que cree Bruce Miller, un neurólogo de la Universidad de California en San Francisco (EE UU). Las evidencias, llamadas a encender la polémica científica, se basan en el estudio de 72 víctimas de la llamada enfermedad de Pick, un proceso neurodegenerativo que afecta a una de cada 100.000 personas.

Los síntomas de esta enfermedad son muy variables. Pero Miller ha comprobado que, de los siete pacientes que revelaban los más graves e inexplicables trastornos en su personalidad, en sus gustos y en su sistema de valores, seis mostraban también una grave degeneración de la misma zona concreta del lóbulo frontal derecho. De los otros 65 pacientes, que no presentaban esas enormes alteraciones en el 'sentido del yo', sólo uno tenía degenerada la misma zona cerebral.

La parte más polémica del estudio es si las alteraciones de personalidad de los pacientes son realmente 'cambios en el yo' o en la 'autoconsciencia', como Miller propone. El científico presentó ayer un estudio con las descripciones de algunos casos en un congreso de la Academia Americana de Neurología celebrado en Filadelfia.

Uno de los pacientes era una mujer de 63 años descrita como 'una conservadora de toda la vida' y que acostumbraba a vestir ropa cara y elegante'. 'La degeneración de la pequeña zona del lóbulo frontal derecho se asoció en su caso a un extraordinario cambio de conducta. Se afilió a una asociación radical de defensa de los derechos animales, empezó a vestir camisetas informales y pantalones desastrados y comenzó a proferir frases como: 'A los republicanos [de EE UU] habría que expulsarlos de la Tierra'.

Otra de las pacientes tenía 54 años. Antes de la enfermedad era una agente inmobiliaria 'dinámica y encantadora', y amante del alto diseño en el vestir. Tras desarrollar los síntomas (y la degeneración de la misma zona del lóbulo frontal derecho), empezó a lucir vestidos del baratillo y abalorios de aspecto chillón. También cambió la alta cocina francesa que acostumbraba a degustar por una loca pasión por la comida basura, sobre todo de la marca Taco Bell, según el estudio.

Una zona misteriosa

'No soy un filósofo, ni mucho menos', declaró ayer Miller a la agencia Reuters. 'Soy un tío bastante simple. No sé, estoy tan familiarizado con la idea de que no somos más que la suma de todas nuestras conexiones neuronales, que esta clase de concepto [que el yo esté en una zona precisa del cerebro] me resulta muy natural'. El científico prosiguió: 'Se trata de una zona del cerebro muy misteriosa. La pregunta es por qué los daños en esta región del córtex cerebral, que no tiene nada que ver con el lenguaje, se asocian a la pérdida de los conceptos del yo. Y la respuesta es: 'No lo sabemos'.

La enfermedad de Pick es un proceso neurodegenerativo lento, incurable y mortal. Es más común en las mujeres que en los hombres, y suele manifestarse entre los 40 y los 60 años de edad. Miller ha utilizado las más avanzadas técnicas de imagen para localizar, con el paciente vivo, las zonas del cerebro que se han visto más afectadas en cada persona.

Los síntomas de 'cambio en el yo' descritos por Miller ocurren en las primeras fases del proceso neurodegenerativo, y sólo en algunos pacientes. Las víctimas sufren luego un progresivo deterioro de gran parte de sus capacidades cognitivas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_