Demolición en La Floresta
El mismo día en que EL PAÍS publicaba una noticia sobre el amenazado porvenir urbanístico de La Floresta, el Ayuntamiento de Sant Cugat hacía demoler por la fuerza, ante la oposición y la estupefacción de una parte importante de los vecinos, un pequeño edificio perteneciente a este entrañable barrio. Los vecinos habíamos pedido reiteradamente al Ayuntamiento que convirtiera en equipamiento para el barrio esta antigua casita llamada de la Sardana, en referencia al uso que tuvo en el pasado. Era una casita pequeña, como La Floresta; graciosa, como La Floresta; abandonada por el Ayuntamiento, como La Floresta, y ahora derruida por el alcalde Recoder sin consultar a nadie. No hay excusas par una actuación semejante ¿Que últimamente había okupas en la casita? Eso no justifica la demolición. ¿Que estaba en ruinas? Pues que la hubiera reparado antes el consistorio, su propietario desde 1984, sin permitir que llegara a ese estado. Es probable que pretendan hacer lo mismo con nuestro histórico casal. Si lo que el Ayuntamiento de Sant Cugat quiere es hacer limpieza étnica en La Floresta, para que puedan okuparla las grandes constructoras, debe saber que contará con la oposición firme de los vecinos.
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