Mas expresa en las tierras del Ebro su oposición a la división en veguerías
El conseller en cap de la Generalitat, Artur Mas, echó ayer en la comarca del Montsià el freno a la propuesta de división territorial de Cataluña en veguerías, tal como plantea el comité de expertos en el informe Roca. Mas se mostró reacio a secundar la propuesta de organización del territorio en veguerías aduciendo que la futura división debe tener en cuenta 'el criterio fundamental de la simplificación administrativa', un argumento que también ha defendido en los últimos días el presidente Jordi Pujol.
'Lo que no podemos hacer desde el Gobierno es empezar a prejuzgar cómo serán las cosas; debemos dejar que los partidos políticos y los grupos parlamentarios hagan su trabajo', argumentó Mas. 'No se pueden crear administraciones y administraciones, lo que significa impuestos y funcionarios sin más', arguyó.
Las declaraciones de Mas llegan un mes después del nombramiento de Francesc Sancho como delegado de la Generalitat en las tierras del Ebro, un hecho que se interpretó claramente como el comienzo del proceso de descentralización, especialmente desde los partidos políticos del territorio. Pero no sólo de ellos. El propio Parlament aprobó una moción presentada por el PSC (con los votos afirmativos de todos los partidos políticos y la abstención de CiU) que proponía la creación del delegado del Gobierno cómo antesala de la división del territorio en veguerías.
El grupo parlamentario de CiU dijo el 7 de marzo (fue el mismo pleno polémico en el que se opuso al Plan Hidrológico Nacional) que se abstenía porque el anuncio de que se creaba el nuevo cargo ya lo habían realizado días antes. Sin embargo, Mas se esforzó ayer en desvincular el nombramiento del delegado del proceso para la nueva división territorial. 'Lo único que hacemos es descentralizar las funciones del Gobierno de la Generalitat en las tierras del Ebro', aseguró.
Las declaraciones de Mas produjeron una rápida reacción de los socialistas de las tierras de Ebro. El primer secretario del PSC, Jaume Antich, dijo que con estas declaraciones Mas demostraba que su partido 'ha perdido el norte'. En su opinión, 'el pacto de CiU y el PP, además de basarse en el PHN, también prevé frenar las veguerías bajo el argumento de que cambiar las provincias supondría cambios en la Constitución, y no tiene por qué ser así, tal cómo concluyó el informe tutelado por Miquel Roca', remachó.
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