El Palacio del Infante pasa definitivamente a manos de Boadilla

El Palacio del Infante don Luis ha pasado definitivamente a manos de Boadilla del Monte, tras la aprobación, el pasado miércoles por la Comisión de Urbanismo, de una modificación puntual de la tercera fase del Olivar de Mirabal. Así, Boadilla del Monte saldará las deudas que tenía con el propietario del palacio, Enrique Rúspoli Morenés. El Ayuntamiento todavía debía al antiguo dueño 993,6 millones, de un total de 2.000 que ha costado la operación.

Rúspoli ya percibió 200 millones en efectivo y 806,4 en fincas municipales libres de cargas. Los restantes 993,6 millones, que es lo que se va a abonar ahora, se saldarían con el aprovechamiento de 226 viviendas en un entorno de la tercera fase del Olivar de Mirabal. Pero esta zona, en un principio, sólo podía albergar 179 chalés, por lo que el Ayuntamiento aprobó el 31 de julio una modificación que permite edificar 649 viviendas en pisos.

La Consejería de Medio Ambiente emitió un informe desfavorable a esta recalificación, donde especificaba que para evitar un incremento de la edificabilidad 'podrían haber sido estudiadas otras alternativas más convenientes'. El visto bueno que ha dado ahora esta consejería a las viviendas ha zanjado el asunto.