El 79% de los encuestados por el CIS apoya que sólo se admita a inmigrantes con contrato de trabajo
El Gobierno se basa en el sondeo para defender que su política de inmigración es la correcta
![Javier Casqueiro](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F6bf002b6-45e4-4086-892e-f8484bc94b05.png?auth=f2b0031a1f63a9c95f31360ec4a9c788e24485954332ad137cddebaba6b4e748&width=100&height=100&smart=true)
El sondeo del CIS, cuyos resultados están basados en 2.500 entrevistas hechas a finales de febrero, refleja un aumento del porcentaje de españoles que declara que sólo permitiría la entrada a los inmigrantes que lleguen con un contrato de trabajo.
Hace un año contestaban así el 65%. Ahora suman el 78,7%. Sólo el 13% responde que no pondría obstáculos legales a las llegadas de extranjeros. El sondeo vuelve a constatar que la inmigración es el tercer problema más importante para los españoles, tras el terrorismo y el paro.
Los españoles confirman que hay empleos que deben cubrir los extranjeros. El 61% de los consultados por el CIS coincide en que hacen falta trabajadores inmigrantes en España.
La encuesta refleja que sólo el 3,2% prohibiría por completo la entrada de trabajadores inmigrantes. El secretario de estado de Relaciones con las Cortes, Jorge Fernández, concluyó al presentar el sondeo, 'con serena y sincera satisfacción', que esos datos confirman la bondad de la Ley de Extranjería y de la política de inmigración del Gobierno.
En cambio, el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, interpretó que la encuesta ratifica el fracaso del Gobierno y demuestra que es necesario un pacto de Estado.
El 49,8% de los ciudadanos reconoce que en términos generales la inmigración es más bien positiva para los países desarrollados. Y el 42% señala que le parecen demasiados los inmigrantes que viven en España, si bien el 40,2% puntualiza que son bastantes, pero no demasiados.
El 86% sostiene, a diferencia de la estrategia del Gobierno respecto a la inmigración, que no hay que dar un trato diferenciado a los inmigrantes en función de su país de procedencia. Sobre el 9% que opina lo contrario, los responsables de la encuesta tuvieron especial interés en conocer sus preferencias. La mayoría de ellos prefiere ante todo a los iberoamericanos (56%). Y sólo un 4,4% se decantan por los procedentes de Marruecos y Argelia. En la escala de simpatía hacia los países de origen de los inmigrantes, la peor nota la reciben los norteafricanos y marroquíes -5,9, en una escala de 1 a 10-, y la mejor los europeos y los latinoamericanos (7,1). Un 93,7% dice que les importaría poco o nada que sus hijos compartieran en el colegio la misma clase con hijos de inmigrantes.
Jorge Fernández destacó que la actitud positiva y tolerante hacia los extranjeros no está avalada todavía por la experiencia, ya que casi un 50% de los españoles no ha tenido nunca relaciones con inmigrantes ni en el ámbito, laboral, ni en el familiar, vecinal o escolar. Un 27,5% de los consultados por el CIS admite que les preocuparía mucho o bastante que un hijo se casara con una persona magrebí.
De otro lado, el sondeo muestra un descenso del optimismo de los ciudadanos ante la situación política -el 25,3% la considera buena o muy buena, mientras en la anterior encuesta era del 30,7%-.
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