El 'descuartizador de Mislata' declara que la muerte de su esposa fue un accidente
Con gritos de 'asesino, criminal' fue recibido Pedro Nuela ayer en la Audiencia de Valencia por un centenar de vecinos de Mislata, donde residía la pareja. Pedro Nuela, que sólo contestó a las preguntas de su defensa, explicó que él y Mari Carmen discutían con frecuencia, que ella era agresiva, que en dos ocasiones le había atacado con un cuchillo pero que nunca presentó denuncia. Para Pedro, todas las discusiones eran iguales: 'Ella gritaba, se ponía muy nerviosa. La dejaba un rato y se le pasaba y me pedía perdón'.
Pero el 6 de octubre de 1995 no fue así. Según su testimonio, la noche anterior tuvieron una fuerte discusión y cada uno durmió en una habitación de la casa. A la mañana siguiente, él la despertó porque Mari Carmen tenía una revisión en el hospital La Fe. La discusión continuó. Mari Carmen se fue hacia la puerta en ropa interior. Él la siguió y al asomarse al rellano ella intentó atacarle con un cuchillo, siempre según la declaración del acusado. Él la esquivó, trató de reducirla por la espalda. 'De pronto, noté todo su peso, cayó al suelo. Le di la vuelta. Intenté reanimarla y vi que estaba muerta'. Pedro afirmó que no acudió a la Policía por miedo. Lejos de eso, la tapó con una manta, la trasladó al baño y se fue a trabajar. La Fiscalía y acusación tratan de demostrar que él es culpable de asesinato. La defensa, que impugna el proceso porque a su defendido se le tomaron cuatro declaraciones en calidad de testigo sin que él supiera que era sospechoso, pide la absolución porque 'fue un accidente'. Tras Pedro, declararon ayer Elizabeth, con quien tuvo una relación sentimental en 1996, el hermano de ésta, dos amigos -a quienes contó parte de lo ocurrido- dos vecinas, dos inspectores y dos peritos. En el proceso ha quedado claro que el acusado descuartizó a la víctima -él mismo dijo a la policía dónde había enterrado los restos-. El acusado, en cambio, no ha confesado el crimen, por lo que serán de gran importancia los testimonios de aquellos que aseguran haberle escuchado decir que la mató. Hoy declarará un amigo que, según el acusado, fue el primero a quien relató parte de lo sucedido aquella mañana.
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