El empresariado no se cree la previsión de IPC

El Gobierno lo sigue haciendo relativamente bien en política económica, según los empresarios encuestados, lo que no es óbice para que consideren irreal o muy ambicioso el objetivo oficial de un incremento del 2% para el IPC en 2001 y reiteren al tiempo su disconformidad, presente ya en anteriores ediciones del barómetro, con la actuación del Ejecutivo en materia de liberalización del mercado laboral (un 50,3% la reprueba), desregulación sectorial (un 46,1%, en desacuerdo) y cotizaciones sociales (un 42,3%, en desacuerdo).

Llama la atención, y es una novedad dentro de las inquietudes expresadas con anterioridad por los empresarios, el alto grado de censura que provoca la actuación del Gobierno en las áreas de sanidad y salud (un 43,1% de los panelistas se muestra en desacuerdo con la política seguida y sólo un 21,5% la respalda). El descubrimiento de varios casos de vacas locas en la cabaña nacional, y las polémicas declaraciones y actuaciones de los ministros de Agricultura y Sanidad, coincidiendo en el tiempo con la solicitud de respuestas para el barómetro, podría explicar la reciente inquietud de los empresarios. En el anterior barómetro el área de sanidad y salud era, para la mayoría de los encuestados (37,3%), indiferente.

Las áreas de actuación del Gobierno que concentran mayor respaldo de los panelistas son el gasto público (65,4%), la privatización de empresas públicas (60,7%) y la fiscalidad (54,3%). Y las que despiertan mayor indiferencia: fomento de las exportaciones (54,9%) y tipos de interés (50,8%).