Úbeda reclama la academia de suboficiales de la Guardia Civil
El Ayuntamiento de Úbeda (Jaén) no se resigna a desprenderse del elemento que, durante décadas, constituyó la base de la economía local: la academia de la Guardia Civil. El centro formativo, que abrió sus puertas en 1945, quedó inactivo en 1996, justo el año en el que el Gobierno central se comprometió a abrir en el mismo lugar una academia de suboficiales para atenuar en parte el impacto generado en el comercio local por la supresión de los cursos de formación de guardias civiles.
Todos los grupos políticos de la Corporación ubetense, PSOE, PP e IU, han hecho un frente común para instar al Ejecutivo central a aplicar el decreto de creación de la academia. El PP llegó incluso a presupuestar 150 de los 500 millones de pesetas del coste estimado en las obras de acondicionamiento del centro formativo.
El alcalde de Úbeda, Marcelino Sánchez, del PSOE, ha valorado el consenso político alcanzado en este tema y ha destacado la importancia que este inmueble supone para la ciudad, tanto en el plano económico como en el social. Sánchez ha alertado del estado de deterioro del edificio y pide al Gobierno que ejecute trabajos mínimos de conservación.
A la ofensiva municipal para reactivar la academia se ha sumado también el PP que, en 1997, a través del diputado Gabino Puche, exclamó con rotundidad que 'la Academia de Suboficiales no corre ningún peligro'. Fue el anterior alcalde de Úbeda, Juan Pizarro, en la actualidad parlamentario andaluz del PP, el que arrancó al Ministerio del Interior el compromiso de ubicar el nuevo centro.
De momento, el Gobierno central mantiene silencio en torno a la petición del Ayuntamiento de Úbeda. Tan sólo ha contestado a una pregunta del senador de Izquierda Unida José Cabrero, donde rechazaba la reversión del inmueble a la ciudad. No obstante, el director general de la Guardia Civil, Santiago López Valdivielso, ha dejado abierta una puerta al comunicar al alcalde ubetense que podría cederse al municipio el uso parcial de las instalaciones castrenses.
El acuartelamiento ubetense abrió sus puertas en el año 1945 y, desde entonces, se han formado en sus aulas más de 100 promociones de las que han salido más de 80.000 guardias civiles. A principios de la década de los noventa, el centro pasó de contar con 5.500 alumnos a unos 2.000, al trasladarse hasta la vecina localidad de Baeza las nuevas instalaciones de la academia. Aquello fue el inicio del declive, que se haría definitivo pocos años después con el cierre definitivo del centro de Úbeda.
Los comerciantes de Úbeda todavía no se han repuesto del mazazo que supuso la desaparición del que hasta entonces era su principal fuente de ingresos, según Sebastián Hurtado, presidente de la Asociación Local de Comercio, Industria y Servicios (Alciser).
